ÁLVARO MORALES.- Desde la misma noche electoral,los móviles de muchos dirigentes y socialistas de base de Tenerife registraron llamadas cruzadas con la misma máxima: es el momento de desbancar a CC de las principales instituciones de la Isla (incluso de las Islas). Desde entonces,no se ha podido esconder,por muchas advertencias que se hayan hecho desde la ejecutiva regional y federal,que ese sentimiento se ha extendido y reforzado,aparte de traducirse en los pactos ya anunciados en municipios como Güímar (que repite experiencia),Santiago del Teide,San Juan de la Rambla y el más que probable de Granadilla (con Tacoronte,Santa Úrsula y otras localidades a la espera,incluida La Victoria). Pese a que José Miguel Pérez insiste en que el que incumpla las directrices se expone a expedientes y sanciones,y aunque hay fuentes que dan por hecho que vencerán sus tesis y las de Ferraz,un gran número de dirigentes,mandatarios locales y afiliados de base del PSC tinerfeño mantienen su pulso ante Madrid y la ejecutiva regional y siguen apostando con fuerza por un acuerdo con los conservadores.

Algunas fuentes directamente implicadas en esta especie de plante van más allá y aseguran que,lejos de partir de una posición de debilidad,los resultados de las últimas elecciones refuerzan al PSC tinerfeño ante la regional y Ferraz,al poseer cuatro alcaldías más que en las seis islas restantes juntas. Según estas tesis,el partido no puede arriesgarse a ir en contra del sentir generalizado en Tenerife de que resulta hasta progresista pactar con el PP para que CC pierda el poder en administraciones en las que gobierna desde hace muchos años,como el Cabildo tinerfeño,el Ayuntamiento de Santa Cruz o municipios como Santa Úrsula o Tacoronte.

Es más,aunque algunos no usan la expresión de forma literal,sí están por admitir que,de pactar con CC y dejar a los nacionalistas con los principales cargos en las Islas (Presidencia regional),Cabildo (presidencia) y alcaldías como la de Santa Cruz,el PSC estaría cometiendo casi un suicidio político,por más que otras visiones sostienen que gobernar siempre reporta mejores réditos que quedarse en la oposición.

Los críticos con las tesis regionales,sin embargo,aceptan la mayor,pero insisten en que sería un error histórico del que,quizás,no se repondrían en mucho tiempo en Tenerife (y en la Palma,El Hierro y otras islas) pactar con CC y no con el PP en muchos sitios.

Como ya ha trascendido en casos concretos,mandatarios y dirigentes del PSC no tienen miedo a los posibles expedientes que se les abran desde la ejecutiva federal o regional si incumplen las directrices,según han señalado diversos socialistas relevantes de la Isla a este periódico.

Dimisión de Pérez

Lo más curisoso es que algunos de los dirigentes señalados,aunque no todos,fueron los que apoyaron al secretario de los socialistas canarias,José Miguel Pérez,ante lo ocurrido con la ejecutiva insular y la de Santa Cruz,así como en las primarias,en las que se convirtió,con claridad,al obtener casi el 70% de los apoyos,en candidato a la Presidencia regional en detrimento de Santiago Pérez. Ahora,y tras los peores resultados electorales en la historia del socialista canario desde 1983,muchos ponen en duda el liderazgo de Pérez y que sea conveniente que siga como candidato futuro,incluso en el caso de que se convierta en vicepresidente tras un pacto con CC.

De hecho,algunos consideran que debió dimitir el lunes posterior a los comicios por la drástica reducción de diputados y votos en comparación con los logrados hace cuatro años por López Aguilar. Por ello,ni siquiera descartan que haya movimientos a corto o medio plazo para exigirle su dimisión o que haya peticiones de un congreso extraordinario.

Esas mismas fuentes,no osbtante,aseguran que esta postura generalizada en favor de un pacto con el PP no resulta contradictoria con la decisión por unanimidad de iniciar negociaciones con CC,ya que,según resaltan,en ningún caso el partido se ha opuesto a hablar con las distintas fuerzas.

El futuro de Pérez en la secretaría general,por lo tanto,depende mucho de qué ocurra en estos días y de aquí a las elecciones generales,momento en el que algunos dirigentes temen que los acuerdos que se firmen ahora puedan quedar en entredicho,sobre todo si son con CC.

Lo que sí tienen claro es que aquellos pactos que ya se han anunciado con el PP no se romperán,por mucho que CC lo exija. Según subrayan estos miembros del PSC,el propio presidente actual de la gestora insular y candidato al Cabildo,Aurelio Abreu,ha recibido la «orden» de las agrupaciones locales de hacer todo lo posible por cumplir este sentir generalizado y tratar de pactar con los populares,lo que no impide,sin embargo,las reuniones con CC para sondear los ofrecimientos y cómo quedaría dicha instituición con un acuerdo entre naconalistas y socialistas.

Por supuesto que hay miembros del PSC que niegan que existan posibilidades de acuerdo con el PP y que están convencidos de que se pactará con CC,pero los otros son claramente mayoría,por mucho que admitan que todo está aún abierto.

OTRAS CLAVES
Soria,presidente como lección

Lo que ha dejado caer José Manuel Soria (PP) sobre que existen diputados socialistas que estarían dispuestos a apoyarlo como presidente regional tiene mucha consistencia si se atiende a que diversos miembros de relevancia del PSC tinerfeño han confirmado a este periódico que,en algunas de las reuniones que han mantenido hasta ahora para analizar los posibles pactos,se han escuchado voces a favor de permitir que Soria presida Canarias por el simple hecho de haber sido el candidato más votado por los electores. De esa manera,según estas fuentes,se intentaría dar una lección democrática respecto a lo ocurrido hasta ahora en las Islas,sobre todo en 2007,cuando López Aguilar obtuvo 26 diputados pero se quedó en la oposición antes de marcharse a Madrid y Bruselas. Además,muchos también creen que Canarias necesita que CC se vaya a la oposición en el Gobierno autonómico,por lo que estarían incluso por la labor de propiciar un pacto regional con el PP.

Frente a estas tesis están las que aseguran,de forma convencida,que ese sentir generalizado acabará doblegándose (quizás en pocas horas) ante lo impuesto por la ejecutiva regional y Ferraz. Según estos miembros del PSC,tendrán que pactar con los nacionalistas y ceder las presidencias regional e insular,así como la Alcaldía de Santa Cruz (otra cosa es qué ocurrirá en La Laguna,donde la aritmética del número de ediles es mucho más favorable a CC). Estas fuentes consideran que muchos de los socialistas críticos acabarán echándose atrás y que lo que afirman de los expedientes lo hacen,de momento,de cara a la galería hasta que se vean con competencias de gobierno. Sobre las posibles presiones para obligar a José Miguel Pérez a que se marche,no descartan que se mantengan,pero dudan de su fuerza si se convierte en vicepresidente regional.

Mientras,durante la jornada de ayer proseguían las negociaciones entre el PSC y CC para intentar pactar en el Cabildo tinerfeño,Santa Cruz y otras instituciones. Aunque se especuló con un pacto cerrado que,como mucho,se anunciará mañana o pasado,diversas fuentes lo niegan y sostienen que se seguirá abordando esta opción durante esta semana sin descartar otras posibilidades. Según ha sabido EL DÍA,durante la primera reunión sobre el Cabildo,Melchior no solo pidió la marcha de Aurelio Abreu,sino que sus ofrecimientos sobre consejerías fueron concebidos por el PSC como «migajas» inaceptables. No obstante,la situación mejoró en la cita del viernes,aunque al PSC le ha molestado que CC dé el pacto casi por hecho.