El anuncio del adelanto de las elecciones generales al 20-N se ha producido cuando el candidato socialista,Alfredo Pérez Rubalcaba,y el PSOE tienen ya bien engrasada la maquinaria electoral. «Vamos a preparar,estamos trabajando en un programa electoral que contiene objetivos ambiciosos y realistas»,ha dicho este viernes el candidato.
Tanto Rubalcaba como el equipo que dirige Elena Valenciano han venido diciendo que trabajaban en el programa y la campaña -que finalmente arrancará el 4 de noviembre- teniendo en mente ambos plazos: el adelanto electoral o el próximo marzo.
Sin embargo,así como el principal partido de la oposición tiene ultimados sus planes (el PP aprobará su programa electoral la primera semana de octubre en Málaga),el equipo de Rubalcaba no ha concretado sus plazos electorales. Al menos no públicamente.
En la web del candidato Rubalcaba se detallan los actos que el socialista ha celebrado desde su proclamación como aspirante a la Moncloa (el pasado 9 de julio) pero no se concretan sus planes futuros,acaso en un intento de desvincularse de la decisión de Zapatero de adelantar las elecciones.
Según dijo este viernes el ex ministro del Interior,el presidente del Gobierno habló con él del adelanto electoral,aunque no quiso aclarar si se reunieron el jueves en la Moncloa -«eso son cosas mías»- ni si consideraba que la nueva fecha puede beneficiar o perjudicar al PSOE. Según fuentes socialistas citadas por Europa Press,el adelanto ha ahorrado al PSOE el desgaste que supondría negociar unos presupuestos muy restrictivos.
El programa
Por ahora,Rubalcaba ha avanzado que su programa será «ambicioso y realista» y pensado para «ganar y gobernar»,al tener,según presagió,la sensación de que «los vientos han girado» a tenor de la última encuesta del CIS,en la que se ha reducido la ventaja de los 'populares'.
Aunque no haya concretado cuándo presentará oficialmente su programa,las propuestas lanzadas en las últimas semanas por Rubalcaba dan fe de que éste está perfilado.
De manera genérica,su proyecto tendrá cuatro objetivos: crear empleo,una economía sana y competitiva,reforzar la igualdad de oportunidades e introducir reformas democráticas en la política porque «es una demanda social»,dijo el candidato este viernes.
Según avanzó,de aquí a la convocatoria oficial de las elecciones cuando se disuelvan las cortes el próximo 27 de septiembre,va a preparar su programa electoral en diálogo permanente con distintos sectores de la sociedad y se ha comprometido valorar las ideas en sí mismas y no por quién las proponga.
Sus palabras pronostican un programa que incluirá guiños al 15-M y a la izquierda,tal y como mostró durante su proclamación como candidato. De hecho,el ex ministro ha asegurado que pretende seguir abriendo debates que «están por otra parte en la sociedad» y «formular propuestas»,como la de establecer un nuevo impuesto a la banca dirigido a crear empleo,»que son tan justas como realizables».
«En un mes hemos conseguido hablar sensatamente de las hipotecas,que se admita algo absolutamente real,que las hipotecas,que han llevado a muchas familias a situaciones de dificultad,se piden se conceden,y a veces quien las pide las pide por encima de sus fuerzas y algunos las conceden sabiendo que quien la pide la pide por encima de sus fuerzas»,por lo que existe una «responsabilidad compartida»,ha dicho.
Los meses que restan hasta el 20-N «son cruciales» para un candidato porque la mayoría de la gente «toma su decisión» sobre el sentido del voto «en el momento en que aparece la fecha» de la cita con las urnas. Según dijo el candidato,este año,como otros anteriores,tendrá pocas vacaciones.
