Por Carlos E. Cué.-  El presidente del Gobierno,Mariano Rajoy,se ha visto obligado en Berlín a responder por primera vez a dos preguntas sobre el escándalo del caso Bárcenas. Rajoy ha insistido en su negativa total del sábado,pero por primera vez ha tenido que reconocer que algunas de las cosas que aparecen en los papeles de Bárcenas sí son reales,aunque no las que se refieren a él ni a las supuestas entregas a la cúpula del PP. Preguntado expresamente por esas cuestiones que han resultado ser reales,y cómo se explica que esos sí sean datos correctos y no los referidos a entregas a él y otros miembros de la cúpula,Rajoy ha contestado: «Reitero lo que dije el sábado. Todo lo que se refiere a mí y a mis compañeros de partido no es cierto. Salvo alguna cosa que es lo que han publicado algunos medios de comunicación. Dicho de otra manera es total y absolutamente falso”.
El hecho de que algunas de esas partidas coincidan con la realidad es precisamente lo que más está complicando la respuesta del PP. Los populares insisten en que algunas de esas partidas figuran en la contabilidad del PP,pero siguen rechazando entregarla a la prensa para que pueda comprobarlo. Algunos extractos han aparecido en el ABC. La contabilidad fue mostrada a los dirigentes el sábado,pero después se les retiró. Esperanza Aguirre pidió expresamente que se entregara a la prensa y la dirección nacional se negó. Antes las preguntas de los periodistas,insisten en que la entregarán en su momento.
Rajoy ha descartado dimitir,como le pide el líder de la oposición. Y en una situación compleja,con Angela Merkel a su lado,que le miraba incómoda,ha intentado defender que tiene fuerzas y estabilidad política para seguir al frente del Gobierno de España. “El Gobierno está con ganas,ilusión y fortaleza. Es un momento difícil pero lo vamos a superar porque las afirmaciones que se hacen son absolutamente falsas”,ha insistido. Lo ha repetido ante la atenta mirada de Merkel y los focos de toda la prensa internacional,tanto es así que también la prensa alemana le ha preguntado por el escándalo.
Rajoy,que había previsto el día de hoy como uno de los hitos del inicio del año político,tuvo que responder más sobre los papeles de Bárcenas que sobre economía. Y siempre para decir que todo lo que sobre él figura en los apuntes de Bárcenas es falso y que sigue con gana de trabajar. «Las cosas que se me imputan son falsas. Me encuentro con las mismas ganas,la misma ilusión,fuerza y coraje que cuando llegue para superar una de las situaciones más difíciles de los últimos 30 años»,ha dicho.
Y ha dejado claro así que se considera con la suficiente autoridad moral para pedir más sacrificios a los españoles. «El Gobierno es estable,el PP tiene una mayoría clara,ha marcado un rumbo,está haciendo una política basada en las reformas y lo va a hacer desde la convicción total de que vamos a conseguir que España salga de esta»,ha añadido.
Rajoy ha evitado de nuevo pronunciar la palabra “Bárcenas”,no ha hecho ningún tipo de crítica a su extesorero,al que se le ha descubierto una cuenta con 22 millones de euros en Suiza,y ni siquiera ha querido aclarar si el PP o el propio Rajoy se querellará contra él,como le ha pedido Esperanza Aguirre y otros. «Es una decisión que está estudiando el partido,que ha puesto en manos de los abogados,pero tomaremos las medidas necesarias para defender la honorabilidad de los miembros del partido»,ha señalado.
Merkel,visiblemente molesta por tener que responder en dos ocasiones sobre la corrupción en España,incluida una mención al escándalo de financiación ilegal de la CDU que en 1999 consolidó su liderazgo interno al enfrentarse a Helmut Kohl,intentó evitar la cuestión. Se limitó a esquivarla con la idea de que ella tiene una “relación de gran confianza con el presidente del Gobierno español”. “Lo que es importante es la relación entre los dos Gobiernos»,remató. Rajoy ha evitado así una frase de preocupación de la canciller sobre la corrupción en España que habría supuesto un duro golpe. En el PP está instalada la idea de que el presidente va a aguantar sin problemas pese a su imagen deteriorada y lo único que podría realmente desestabilizarlo,además de la estrategia de Bárcenas,de quien en estos momentos está muy pendiente,sería una presión europea como la que sufrió en su día Silvio Berlusconi o Giorgos Papandreu por distintos motivos. La actitud de Merkel en la rueda de prensa,evitando entrar al fondo del asunto,parece indicar que esa posibilidad no está encima de la mesa en este momento.