Si fuera catalán y tuviera decidido volver a votar de nuevo,lo hubiera hecho por Ciutadans,una plataforma cívica y cultural que en seis años ha demolido las viejas maneras de hacer política de los partidos tradicionales. Esos partidos que siguen de tropezón en tropezón sin saber como salir del abismo en el que andan metidos. Da lo mismo que CIU y el PSC se hayan dejado por el camino centenares de miles de votos y dos decenas de diputados o que el PP gane un escaño y siga con la majadería del nacionalismo español. Por muchos mensajes que los ciudadanos transmitan,siguen en el mismo sitio,insisten en no moverse,sin romper aguas y con un discurso rancio y decadente.
Están en el alambre y siguen a los suyo por qué así creen qué les va bien ,aunque el país se encuentre al borde de una grave explosión social. Hasta hace unos años en Venezuela había dos grandes partidos,igual que en España,los socialdemócratas de Acción Democrática y los conservadores de COPEI ¿alguien sabe algo de ellos?. Cada 4 años se cambiaban el gobierno como si fueran cromos y competían para ver quien robaba mas en las mismas narices de la gente. Los venezolanos se hartaron de tanto ladrón y les dieron dos patadas en el culo ; preferían una aventura arriesgada a que siguiera el saqueo. En España,bajo mi punto de vista,la situación manifiesta algunos síntomas similares que tienen a la sociedad muy cabreada; el piélago de corrupción es bestial y la manipulación a la que nos quieren someter es detestable. Hacer zapping con el mando de la televisión el domingo por la noche y ver el análisis de los contertulios sin un vaso de agua y un «almax» al lado,era un grave riesgo para la salud. La «alegría» provocadora del fracaso estrepitoso de CIU en los medios ultras madrileños donde los periodistas de la derecha se van rotando de canal todos los días,tendrá en el futuro inmediato un coste muy alto. Una noche cenando en Santa Cruz,el entrenador y escritor Ángel Cappa,me dijo que en su país,Argentina,a eso se le conoce como la «fútbolización» de la política. Mal asunto.
Todo es mérito de Zapatero. Dejó a su partido para el arrastre,perdió casi todos los gobiernos autonómicos,ayuntamientos históricos donde siempre había gobernado,abandonó al socio mediático de toda la vida,el grupo Prisa,se alió con Jaume Roures para montar una televisión,la Sexta y un periódico,Público. El desenlace ya es conocido; el periódico cerró ,la televisión la absorbió Antena 3 y el grupo Prisa atraviesa una grave crisis financiera. En unos meses el PSOE se quedó sin medios «amigos» y en los canales de la TDT que el gobierno de Zapatero aprobó,las empresas de comunicación cercanas al PP se adueñaron de la mayoría de las frecuencias. Favor que prestaste enemigo que te echaste. Si a usted se le ocurre por casualidad pedir algún consejo a Zapatero,olvídese. Le llevará a la ruina.
La deserción de sus compromisos con la ciudadanía de la inmensa mayoría de aquellos qué se dedican a la cosa pública es alarmante,si tenemos en cuenta el momento dramático qué viven millones de personas,de niños sin alimentarse,de jubilados qué han perdido hasta las ganas de vigilar las obras del barrio,de bares llenos de gente qué no tiene nada que hacer sentados en la barra con la mirada perdida en la televisión,de los qué son arrojados de sus casas como agua sucia por no poder cumplir con el pago mensual de su hipoteca,o las familias con varios hijos qué tienen que jugarse en un cara o cruz dramático cuál de ellos sigue en la universidad por qué el dinero sólo da para que estudie uno.
El gobierno embustero e inútil de Rajoy ha recortado el programa de becas y miles de jóvenes no tienen acceso a estudios superiores. Con algo de fortuna,podrán afiliarse a algún partido y aspirar a ser concejal de Urbanismo qué parece ser el negocio mas rentable del siglo y la carrera no universitaria con mas futuro. Para completar el círculo vicioso,como seguro que le irá bien en la política,puede abrir mas tarde un negocio de señoritas de alto standing,que como escribió un día en El Mundo,Salvador Sostres,sobre aquellos dos concejales multimillonarios de los «tantos por cientos» y que no sabían que hacer con tanto dinero. Uno le pregunta al otro,¿y ahora que hacemos con tanto dinero?,el otro responde !! montamos un negocio de chicas de alto nivel ¡¡¿y si nos va mal? a lo que su compañero responde !! entonces lo abrimos al público!! .