Julio Barea,responsable de la campaña de Energía y Residuos de Greenpeace criticó la «poca información por parte de Gobierno y prensa marroquí» sobre el petrolero encallado. En declaraciones a Radio El Día explicó que está cargado con 5.000 toneladas de fuel pesado y auguró que,si no se actúa pronto,existe un grave riesgo de marea negra.