Es posible,que no haya nada mejor para una persona a la que le gusta escribir y exponer algunas teorías,que estas sean refrendadas por la realidad. Sinceramente,no es mi caso. Y no lo es,porque suelo opinar de asuntos desagradables: mentiras,engaños,chantajes,fraudes… vamos,lo que es el mundo de la política,en general. Lo que pasa es que la realidad es testaruda y por desgracia,en ciertos temas me da la razón.
El 8 de enero,en mi artículo “La extinción de los dinosaurios” expuse que los grandes partidos políticos (Psoe,PP,CC…) van camino de la fosilización por su progresivo alejamiento del ciudadano y por su incapacidad para la resolución de problemas concretos. Parece que Bárcenas,tesorero del PP nacional,está de acuerdo con mis puntos de vista y quiere acelerar el proceso,mangando 22 millones y pasando sobres con dinero negro a aquellos,que nos exigen recortarlo todo. En el Psoe ,en CC y en otros partidos fustigados por el PP,hoy se ha decretado día de fiesta,que concluirá cuando le toque a alguno de estos partidos,justificar el siguiente robo,desfalco o pelotazo que ha de venir. La veda está abierta.
Por otro lado,Inés Rojas,consejera del (des)gobierno de Canarias representó ayer de manera magistral,lo que llamé “el tonto útil”,hace solamente 5 días. Dice la señora Rojas: “que en Canarias hay 150.000 personas en exclusión social. Que se ha multiplicado por 2 en 5 años,pero que todavía no estamos en una situación alarmante” Claro que sí,amigos,todavía podría ser peor y… no se… podría llover,por ejemplo. Después de esta declaración payasil,alguien debió haber añadido un toque de bocina,a lo Harpo Marx. Y lo peor es que añade: “confío en las gestiones de Paulino Rivero en Europa”. Asombroso. Cuando la señora Rojas comentó toda esta sarta de tonterías,algún periodista le tenía que haber preguntado qué: “¿la cosa no es alarmante para quién?” Para Paulino,que anda de obras en su chalet de lujo,parece que muy alarmante no es. Para Inés Rojas,que dice cualquier sandez contraria a la inteligencia para salvar su puesto,pues tampoco. Igual,cuando lleguemos a 300.000 personas (a este ritmo,pronto) alguien se alarma.
Viendo el estado actual de las cosas y que el presente ya es lamentable,en el futuro de Canarias,no se aventuran más que piojos y moscas verdes. Es triste,de verdad y además espero equivocarme,pero las señales son más que evidentes. Plagas de sarna en el IASS,posibles vacunaciones contra la mosca del dengue,ciudadanos (ayer en posición cómoda) comiendo restos de la basura… ¡El tercer mundo llama a nuestra puerta,amigos! ¿Exagerado? Espero que sí,pero no tiene pinta.
¿Y nuestra clase dirigente? Ahí están. ¡Qué bonito era gobernar cuando el dinero europeo entraba a toneladas! Eso sí que daba gusto. Riéndonos de los alemanes que nos mandaban la pasta para construir imbecilidades de todo tipo,colocando a los amigotes y haciendo millonarios a los empresarios de la construcción (y apartando algún maletín para gastos- supuestamente,claro). Obras estúpidas en Canarias sobran (y en La Gomera también hay una buena colección,por cierto). Gobernar así no tenía mérito ninguno,es más,hasta un chimpancé lo podría haber hecho de manera bastante aceptable. Pero gobernar ahora,ya es harina de otro costal. Estos tiempos requieren imaginación y originalidad; y teniendo en cuenta que nuestro sistema propicia la ascensión de los mediocres y los golfos,pues mal futuro tiene la cosa.
En el futuro,hemos de librarnos del forofismo que nos ha llevado a esta situación. “Yo siempre voto al Psoe”(aunque me roben en la cara) “Yo voto al PP”(aunque la corrupción les salga por las orejas) “Yo soy de CC”(aunque sean unos negados)… El forofismo está bien para el fútbol y para otras cuestiones de la vida,pero en política,si no queremos entrar de lleno en el tercer mundo,habrá que elegir a los competentes,habrá que abandonar la marca de partido (que ya hoy,no representa casi nada) y habrá que estudiar los programas y velar porque estos se cumplan (tanto a nivel individual,como por medio de los colectivos sociales). Dejar de elegir “al menos malo” e intentar hallar al competente. De no ser así,creo que en unos años volveré a acertar (desgraciadamente).
Para terminar,no quiero dejar de aludir a la denuncia que ha interpuesto Pedro Medina contra nuestro empleado presidente,el señor Curbelo,por la gestión del incendio. Está claro que mientras que las cosas no queden meridianamente claras (que no lo están) la sombra del incendio se le seguirá apareciendo a nuestro presidente,de vez en cuando (tratar de dar un tema por cerrado,cuando ni siquiera está empezado,es lo que tiene). Y en esta ocasión,me he fijado en dos respuestas suyas que demuestran claramente que toma a los gomeros por idiotas profundos:

Dice Curbelo que “la Fiscalía archivó la causa porque eran una colección de mentiras” ¿perdón? La Fiscalía archivó la causa alegando,y cito textualmente “que no hay regulación penalística en materia de negligente gestión política”. Para los profanos: que aunque un político cometa una cagada suprema,no hay una ley para enchironarlo. Vamos,que los políticos son rápidos para hacer leyes para los demás,pero no suelen tener la misma celeridad con leyes que les puedan perjudicar. No dice nada de mentiras o de que no haya negligencias por ninguna parte.

Dice Curbelo que “Habrá que preguntarle a él (a Pedro Medina) dónde se encontraba durante esos días puesto que no se le vio” Señor Curbelo,donde estaba Pedro Medina o dejaba de estar es absolutamente indiferente,al igual que dónde estaba yo o dónde estaba mi abuela. Lo que importa es dónde estaba usted que es el presidente del Cabildo y se le paga (muy bien para mi gusto) por estar ahí. Ni Medina,ni yo,ni mi abuela (que yo tenga noticias) tenemos ninguna responsabilidad de gobierno.

Por tanto,serían de agradecer excusas más elaboradas,yo creo que los gomeros merecen un poquito más de esfuerzo.
Por último y para los suspicaces,al señor Medina no tengo el gusto de conocerlo y me produce la misma absoluta indiferencia que el señor Curbelo,salvo en lo que atañe a mi isla,que entonces sí que me siento interpelado.
 
Pedro Rodríguez (La Gomera Se Mueve)