Solo una investigación rigurosa y exhaustiva determinará qué ocurrió realmente en la Gala del Carnaval 2013. De momento,lo único que hay son algunas explicaciones sueltas de lo que ha ocurrido,bastantes pregunas por responder y mucha incertidumbre. La única certeza es que no era la primera vez que se usaba fuego frío,informa en su edición digita el periódico Diario de Avisos.
“Es imposible prever lo que se desconoce: el Ayuntamiento no autorizó en ningún momento el uso de elementos pirotécnicos en los vestidos de las candidatas“. La concejala de Seguridad del Ayuntamiento de Santa Cruz,Carmen Delia González,se manifestó así de contundente en Teide-Radio y aseguró que el consistorio no sabía que el traje de la candidata número 9,Magnolia Cruz,llevaba incorporado el artefacto que provocó el incendio. Según las bases de la Gala,consultadas por este periódico,“se permite el uso de fuegos artificiales,fuegos fríos o cualquier otro elemento siempre que no se ponga en peligro la seguridad de la candidata y el público en general,previa comunicación y aprobación del disparo por el Organismo,con una semana de antelación”. Además,en el mismo texto se especifica que “no se permitirá rectificar las medidas ni por el diseñador ni su equipo en el momento en que la candidata pase por la baliza en presencia del notario,ni en el momento de salir al escenario”.
De hecho,no es la primera vez que un diseñador decide usar fuego frío en una gala de elección de la Reina del Carnaval. En 2011,por ejemplo,Juan Vidal utilizó fuego frío en su fantasía Amor eterno y otras quimeras y “fue supervisado por Protección Civil y por la Comisión de Fiestas”. “No había ninguna cláusula que impidiera el uso de fuego frío; se me exigieron requisitos y pruebas que presenté”. El diseñador explicó,además,que Fiestas le asesoró en todo momento y que antes de la gala se probó el dispositivo para comprobar que no existía riesgo.
La opinión de la abogada
Para la abogada Lourdes del Real,“la primera responsabilidad de lo sucedido es del Organismo Autónomo de Fiestas y Actividades Recreativas”,dependiente del Ayuntamiento de Santa Cruz,y “en segundo lugar del propio consistorio”. La jurista descarta implicar al Cabildo de Tenerife porque se limitó “a arrendar el lugar”.
A su juicio,el organismo autónomo tenía la obligación de llevar a cabo las comprobaciones oportunas. No obstante,Del Real reconoció que las bases donde se detallan todos los requisitos que deben cumplir los trajes de las candidatas no son claras y que no se entiende con claridad si solo había que comunicar lo que se iba a usar. “No está nada claro qué significa exactamente autorizar el disparo”,señala.