Se ha cumplido lo que en su momento dije respecto a los centros infantiles en las zonas rurales y municipios pequeños. Algunos incluso se rieron de mi planteamiento pero el tiempo me ha dado la razón.
Los ayuntamientos no podemos hacernos cargo en solitario de costear un servicio tan necesario para nuestros jóvenes como la educación. El Ejecutivo regional nunca se puso de acuerdo con los municipios rurales con un número de pequeños de usuarios para financiar el servicio educativo y en la mayoría de los casos,los ayuntamientos lo sufragaban en un porcentaje elevado. Esta prestación resulta deficitaria incluso para aquellos municipios que cubrían el cupo de alumnos y una carga importante para los presupuestos municipales.
Ante esta situación,solo caben tres posibles soluciones: el cierre del centro,llegar a algún tipo de acuerdo para buscar uno cercano,o que el servicio sea asumido por el Cabildo,la Comunidad autónoma o el Estado.
Desde el Ayuntamiento de Agulo hemos optado por la segunda opción a pesar del coste tan importante que supone para las arcas municipales. Hemos llegado a acuerdos con los padres y madres de los alumnos mediante los cuales nuestra corporación sufraga el transporte hasta el centro escolar,un gasto que supera los 20.000 euros anuales,mientras los padres pagan una cuota de unos 130 euros al mes para que sus hijos asistan al centro.
Sin embargo,creo que tenemos que buscar una solución a esta situación. La enseñanza de 0 a 3 años debería ser equiparada a la de 3 a 5,de esta manera conseguiríamos prestar un servicio de calidad con personal cualificado con todos los recursos necesarios. O damos un paso atrás y fomentamos meras guarderías o ludotecas donde los niños simplemente pasen el rato atendidos por personal no cualificado,y que no estimulen el desarrollo intelectual del menor. De otra forma,habría que cambiar la denominación a estos centros donde no haya que educar,solo cuidar a los niños y niñas con personal que no requiera una especial cualificación profesional y que suponga un menor coste.
La ley prohíbe que los menores de estas edades vayan a un local municipal de estas características y una vez allí una madre o una amiga los cuide. Las reglas del juego están escritas y el que desee saltárselas,que asuma su responsabilidad.
Por ello,estimo que todos aquellos que dispongan de este tipo de instalaciones en su municipio tendrán que asumir una medida que disgusta,el cierre del centro hasta que se dé una solución definitiva con un compromiso financiero adecuado. En caso contrario,los ayuntamientos deberemos considerar otro tipo de realidad legalmente establecida que proteja a los responsables de las instituciones y no acabar procesados.