El PP exigió hoy a la consejera de Políticas Sociales,Inés Rojas,que se «ponga las pilas de una vez» en la atención a la dependencia,que tiene «congelada»,y a la ocupación de camas hospitalarias por parte de crónicos,y le advirtió de que si no tiene dinero para ello «lo pinta o se lo pide» al presidente Paulino Rivero de la partida destinada a sus asesores.
La diputada regional del grupo Popular Milagros Bethencourt se dirigió de esta manera en el Parlamento regional a la consejera de Cultura,Deportes,Políticas Sociales y Vivienda,Inés Rojas,en una comparecencia sobre la derivación a centros sociosanitarios de personas que ocupan plazas hospitalarias pese a tener el alta médica.
Bethencourt aseveró que el PP no le va a dar «más oportunidades» a la consejera y se refirió «al lamentable episodio» de las denuncias que al efecto realizó Paulino Rivero,con lo que se evidenció «una vez más la caótica gestión» de las consejeras Inés Rojas y Brígida Mendoza,titular de Sanidad.
La parlamentaria dijo que ambas consejeras son cuestionadas «un día sí y el otro también pero siguen ahí haciendo los coros a Rivero,que ha perdido definitivamente el norte y sólo se entretiene en sus «paulinadas»,pues ha renunciado a trabajar para los canarios».
Esta afirmación fue calificada de una falta de respeto por parte de Inés Rojas,que pidió a Bethencourt que retirase su calificación de que las consejeras aludidas son «coristas»,a lo que la parlamentaria popular respondió que no rectificaba sino que se ratificaba en lo dicho.
Inés Rojas se refirió a la orden que elaboran conjuntamente su consejería y la de Sanidad para regular el régimen de derivación de las personas que ocupan plazas hospitalarias y reciben el alta,y que en su opinión convierte a Canarias en la primera Comunidad Autónoma en regular esta situación.
Señaló que esta orden vendrá a resolver un problema que existe en todo el Estado y será garantista con los derechos de las personas al tiempo que abre la posibilidad de aumentar las plazas sociosanitarias de la red pública y concertada,para lo que se contará con los cabildos.
Actualmente se tramitan los informes jurídicos y económicos para «pronto vea la luz» la citada orden,que no supondrá la introducción de nuevos copagos por parte de los usuarios salvo el ya estipulado en lo relativo a la pensión del beneficiario,añadió la consejera.
Milagros Bethencourt reprochó a la consejera que las urgencias están colapsadas por falta de camas,y éstas están ocupadas por crónicos y dependientes «por su nefasta gestión»,y pidió a Rojas que se ponga a trabajar porque de los 400 pacientes que según Rivero ocupan plazas de hospital muchos «forman parte de los 46.000 dependientes en lista de espera» en Canarias.
Según la parlamentaria popular,los canarios fallecen esperando el reconocimiento de la dependencia o la prestación que conlleva esta ley,y dijo que desde 2010 han fallecido más de 8.000 personas a la espera de la evaluación.
«La dependencia no está colapsada,está congelada porque no la aplica»,apuntó Bethencourt,quien especificó que apenas 300 dependientes en Canarias tienen reconocido el derecho a la prestación y la Consejería tiene 53 expedientes abiertos de responsabilidad patrimonial por este motivo,con sentencias firmes en su contra.
Inés Rojas replicó que por el contrario,Canarias ha salido de los puestos de cola de la dependencia y está por encima de la media en prestaciones económicas en este ámbito,según los datos del Ministerio del área.
El diputado del grupo Nacionalista Canario José Luis Perestelo consideró que todos los partidos son responsables de esta situación,pues todos han participado en la gestión social y sanitaria en los últimos años,y apuntó que lo que planteó el presidente Paulino Rivero «quizás de forma poco afortunada» es un problema social,y no exclusivamente familiar.
El portavoz del grupo Mixto por Nueva Canarias,Román Rodríguez,dijo que el presidente no abrió ningún debate,pues lo que hizo «fue intervenir y hacerlo mal al culpar a las familias».
En su opinión,el problema es que Canarias no acaba de encauzar la solución a esta situación,para lo que sugirió unir sanidad y servicios sociales,y puso como ejemplo «lo mal que se ha hecho» en los centros sociosanitarios del norte y sur de Tenerife,que ahora se han transformado «en un híbrido que no se sabe lo que es». EFE