El ultraman catalán se enfrentaba esta semana al reto de su vida,el Red Bull 7 Islands,siete triatlones de distancia Ironman,en siete días consecutivos,en las 7 Islas Canarias. “No tengo la sensación de haber dado el 100%. Han influido muchos factores externos desde el principio”,comentaba esta mañana. Una ola de calor que azota el archipiélago estos días y una calima inesperada han hecho que el esfuerzo por recorrer cada kilómetro a nado,en bici o en carrera,haya sido el doble de lo habitual. “No sé qué ha pasado. Cuando pones a tu organismo al límite,cualquier detalle fuera del guión puede afectarte.”
Y así ha sido. En el segundo día del reto en La Gomera,tras haber terminado el tramo de natación y a los 45 minutos de estar sobre la bici,Josef comenzó a tener problemas para respirar y una tensión baja. La organización decidió llevarlo como prevención al hospital de Nuestra Señora de Guadalupe en Santiago. Allí se le diagnóstico un golpe de calor,deshidratación y destrucción muscular. Tras pasar unas horas con suero y realizarle varias pruebas,Josef volvió al hotel para descansar. “Creo que es posible hacerlo y en un plazo razonable de tiempo hay que volver a intentarlo. Hemos aprendido muchas cosas de esta experiencia. Hay que llegar muy descansado y sobre todo bien hidratado para prevenir.”
Seis días antes de viajar a Canarias,Josef estuve en el Sahara participando en la Titan Desert,con el objetivo de hacer kilómetros y coger fondo para el 7 islands. “Tal vez los seis días que han pasado no han sido suficientes para recuperarme.” Ahora no tiene planes a corto plazo,volverá a Barcelona para descansar y para pensar en su próximo reto.