Con estas expresiones,la portavoz del PP,Maria Australia Navarro,volvió ayer a poner el plan sobre la tribuna de oradores para subrayar que las inversiones prometidas por el Gobierno central son un «fraude político» y un «engaño».
No sin cierta dosis de paciencia,Paulino Rivero se incorporó de su escaño y replicó a la portavoz del PP que,«un plan diseñado para 10 años objetivamente no se puede hacer una valoración razonable cuando sólo han transcurrido 2».
El jefe del Ejecutivo autonómico admitió que en el Plan Canarias hay «algunos nubarrones que espero que se despejen pronto»,por ejemplo en un gobierno conservador. «Espero que ustedes refrenden el plan si llegan a gobernar»,dijo.
Pero Rivero enfatizó en los «muchos claros» que presenta el documento,y lo ligó directamente al incremento de la llegada de turistas gracias a la rebaja de las tasas aéreas,el plan de empleo,el hecho de que la Comunidad Autónoma no esté en «bancarrota económica como algunas» -en alusión a las gobernadas por el PP-,las ayudas al sector primario y los incentivos a la promoción exterior,citó.
Sin embargo,Navarro desoyó lo dicho por su interlocutor y le pidió que «sea honesto,señor presidente y reconozca lo que todos sabemos que es un fraude». Además,«se acaba la legislatura nacional,y el Partido Socialista no ha cumplido»,concluyó.