El Ayuntamiento de Vallehermoso celebrará los días 24 y 25 de noviembre un programa especial con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, reforzando el compromiso municipal con la igualdad, la prevención y la sensibilización social. Las actividades combinan arte, música y participación ciudadana, utilizando como hilo conductor el lema “el grito de la libertad”, que invita a rechazar de forma colectiva todas las formas de violencia machista.
El lunes 24, a las 12:00 horas, la Casa de la Cultura acogerá la inauguración de la exposición El Vestido Blanco, de la fotógrafa Michelle Fuertes Medina, una serie autobiográfica que aborda la violencia de género desde el autorretrato y la memoria emocional. Tras la apertura tendrá lugar una visita guiada, seguida de una actividad de sensibilización con mariposas, como gesto simbólico de transformación y resistencia. Participará el alumnado del CEO Vallehermoso. La jornada continuará en el salón de actos con una charla-coloquio con la autora, acompañada de la actuación de la cantante local Regina Morales, quien interpretará canciones vinculadas a la igualdad y la libertad.
El martes 25, a las 11:00 horas, la muestra se trasladará al espacio público con el montaje de paneles expositivos en la plaza de la Constitución, donde también se instalará un punto informativo con materiales divulgativos dirigidos a la población joven y adulta. La acción busca reforzar la visibilidad del mensaje más allá del ámbito cultural, promoviendo la reflexión colectiva y la participación activa de la ciudadanía.
Sobre la exposición
El Vestido Blanco es un proyecto fotográfico autobiográfico de Michelle Fuertes Medina (Madrid, 1992), fotógrafa formada en la Escuela de Arte La Palma que, tras una década en el extranjero, se ha afincado en La Gomera y desarrolla su trabajo como profesional freelance. La autora ha sido reconocida con el primer premio Juventud y Cultura 2021 y con la Ayuda a la Promoción y Fomento de la Participación Juvenil 2022, que permitió materializar esta serie.
La muestra reúne ocho fotografías de gran formato en las que la artista utiliza el autorretrato y un vestido blanco como símbolo del maltrato sufrido, articulando títulos como La (no) verdad o La (no) vida para separar la identidad de la persona de la violencia padecida. A través de este lenguaje visual, la exposición invita a reflexionar sobre las formas visibles e invisibles de la violencia de género y a reivindicar relaciones basadas en el respeto, la igualdad y la libertad.

