Observatorio de la Aemet en Izaña, cubierto de nieve en 2018. / AEMET

Canarias ha vivido el invierno más cálido desde que hay registros, con 2,5 grados por encima de la media del periodo de referencia (1991-2020), y el primero en 108 años en el que no nieva en el Observatorio de Izaña, en Tenerife, a 2.364 metros de altitud.

Estas son las principales conclusiones del balance climatológico del invierno 2023/2024 que ha presentado este jueves el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Canarias, David Suárez, quien ha destacado además que solo doce días de este periodo han estado libres de la calima (polvo del Sahara en suspensión), una situación inusitadamente extraña en las islas y en estos meses.

En una rueda de prensa celebrada en la sede de Delegación del Gobierno en Las Palmas de Gran Canaria, Suárez ha remarcado que estos datos muestran una evolución del clima en Canarias en una tónica que puede estabilizarse a largo plazo, con una tendencia hacia el aumento de temperaturas y unas precipitaciones más bajas en la región subtropical entre un 7 y un 10 % de aquí a 2050.

Sobre lo inusual en concreto de este invierno climatológico, periodo que no coincide con el invierno astronómico puesto que va desde el 1 de diciembre al 29 de febrero, ha explicado que ha estado marcado por el fenómeno de El Niño (la oscilación térmica cíclica del Pacífico, que condiciona el clima mundial), y que espera pueda irse debilitando conforme avance el año.

Si bien, según el adelanto de cómo será la primavera, se prevé que los próximos trimestres sigan siendo más cálidos y secos de lo normal.

Además, en cuanto a las precipitaciones acumuladas, el archipiélago solo registró algo más de 36 litros por metro cuadrado, lo que supone un 28 % de lo normal en este periodo en Canarias, que es de 130 l/m2, con un enero que fue extremadamente seco, ya que solo se recogió un 13 % de lo habitual.

En una rueda de prensa celebrada en la sede de Delegación del Gobierno en Las Palmas de Gran Canaria, Suárez ha remarcado que estos datos muestran una evolución del clima en Canarias en una tónica que puede estabilizarse a largo plazo, con una tendencia hacia el aumento de temperaturas y unas precipitaciones más bajas en la región subtropical entre un 7 y un 10 % de aquí a 2050.

Sobre lo inusual en concreto de este invierno climatológico, periodo que no coincide con el invierno astronómico puesto que va desde el 1 de diciembre al 29 de febrero, ha explicado que ha estado marcado por el fenómeno de El Niño (la oscilación térmica cíclica del Pacífico, que condiciona el clima mundial), y que espera pueda irse debilitando conforme avance el año.

Si bien, según el adelanto de cómo será la primavera, se prevé que los próximos trimestres sigan siendo más cálidos y secos de lo normal.

Las anomalías estuvieron más marcadas en las medianías y cumbres del archipiélago, y además en enero se alcanzaron 31,7 grados en La Oliva (Fuerteventura), la temperatura más alta de cualquier invierno en el archipiélago.

EN ENERO SOLO LLOVIÓ 4,7 LITROS POR METRO CUADRADO

En cuanto a las precipitaciones, solo cayeron 36,3 litros por metro cuadrado de media en todo el invierno climatológico, es decir, un 28 % de lo normal en base al periodo de referencia, con un enero que fue, además, extremadamente seco.

En el primer mes de 2024 solo llovió 4,7 litros por metro cuadrado de media en el conjunto del archipiélago (el 13 % de lo esperado).

En diciembre, por su parte, llovió un 41 % de lo esperado, con 23,3 milímetros de media, mientras que el febrero cayeron 8,6 litros por metro cuadrado de media, un 23 % de lo normal en el periodo de referencia.

El carácter seco o muy seco ha sido el predominante en gran parte del archipiélago, a excepción de la zona norte de Gran Canaria y nordeste de Tenerife (Anaga) y La Palma, donde ha sido calificado de normal.

El año hidrológico, que empieza el 1 de octubre, se ha saldado con 82,7 milímetros de media, el 41 % de lo esperado, lo que le sitúa como el cuarto más seco desde 1961.

CALIMA EL 85 % DE LOS DÍAS DEL INVIERNO

En los datos facilitados este jueves por la Aemet también se refleja que este invierno ha tenido más episodios de calima en el archipiélago de lo normal, hasta el punto que el 85 % de los días entre el 1 de diciembre y el 29 de febrero tuvieron presencia de polvo en suspensión en la atmósfera.

En este periodo, ha habido seis días de calima intensa, es decir, aquella que afecta a la visiblidad por debajo de los 10 kilómetros, y solo en doce días los canarios se libraron del influjo del polvo sahariano.

Por primera vez en 108 años desde que se tienen registros, no ha habido precipitación en forma de nieve en el Observatorio de Izaña, superando los 0,9 milímetros de 2003 que hasta la fecha eran el registro más bajo.

En cuanto a la temperatura del agua del mar, también ha sido destacado que en este invierno climatológico ha sido superior a lo normal en 1,6 grados, hasta situarse en los 21,71 grados.

Finalmente, este ha sido el tercer invierno con más horas de sol desde que se tienen registros en Canarias, con 741 horas.