El Ayuntamiento de San Sebastián de La Gomera rinde homenaje al paso de la llama olímpica y a los corredores que portaron la antorcha hace 55 años, un momento histórico recreado en la Playa de la Cueva con el encendido simbólico del pebetero.

El 16 de septiembre de 1968, la llama olímpica llegó al puerto de San Sebastián de La Gomera a bordo de la corbeta de la Armada Española “Princesa”, en su recorrido desde Grecia hacia Méjico para inaugurar los Juegos Olímpicos que se celebraban, por primera vez, en un país latinoamericano.

Un acontecimiento histórico que se recreó este 16 de septiembre, con la recepción de la antorcha en el puerto de San Sebastián de La Gomera y lcelebración posterior de una carrera de relevos por las calles del centro capitalino, finalizando en la Playa de La Cueva.

Angélica Padilla, alcaldesa de San Sebastián, señaló que el paso de la antorcha olímpica por la isla es un acontecimiento histórico que sigue causando orgullo y admiración en la sociedad gomera, añadió que “la isla fue incluida dentro de la trayectoria de la llama olímpica pues aquel relevo de la antorcha del 68 simbolizaba el vínculo entre las civilizaciones mediterránea y americana. La conexión entre Canarias y Latinoamérica es una cuestión histórica, de convivencia y de respeto mutuo. Son muchas las cosas que nos unen y eso queda reflejado en la programación de estas Fiestas Lustrales”

Por su parte, el presidente del Cabildo, Casimiro Curbelo, tuvo palabras de recuerdo a los que participaron hace 55 años en el traslado de la antorcha a su paso por La Gomera y lo que supuso ese momento para la historia de la isla. «Fue un punto de inflexión en el fortalecimiento de los lazos con América a partir del hecho colombino. Sin duda una fecha que ha quedado marcada para los ciudadanos de esta isla, también por la participación, por primera vez de un ciudadano de la isla, Antonio Marcos Chinea, en los Juegos Olímpicos de México, hasta donde llegó la llama», dijo.

Con el ondear de banderas y las vestales que simbolizan el encendido del fuego en Grecia, el corredor de montaña Cristofer Clemente fue el encargado de encender el pebetero, junto a una nueva generación de corredores. Todo ello ante la presencia de los portadores de la llama olímpica en 1968, entre los que se encontraba el primer portador de la antorcha Francisco Herrera Padilla y sus compañeros José Luis Niebla García, Luis Macías García, Jorge Herrera Bencomo, Manuel Armas Herrera y José Hernández Padilla.

Una celebración que también contó con el único deportista gomero que ha participado en unas olimpiadas, el boxeador Antonio Marcos Chinea. Natural de Agulo, el Campeón de España no pudo estar presente aquel 16 de septiembrepuesto que se encontraba concentrado con la delegación española en los Picos de Europa, antes de viajar a Méjico.

En una ceremonia conmemorativa llena de simbolismo, la llama olímpica ardió de nuevo en la escultura de la antorcha creada por Ezequiel de León, iluminando la noche en la Playa de La Cueva.