Casimiro Curbelo, junto a representantes regionales, insulares y locales, durante una visita a las obras del centro sociosanitario de San Sebastián

El presidente del Cabildo, Casimiro Curbelo, adelantó que el centro sociosanitario que se construye en San Sebastián de La Gomera estará concluido en el próximo mes de agosto. Así lo expuso después de abordar los avances de esta infraestructura cuya inversión alcanza los 15 millones de euros, siendo unas de las acciones públicas con mayor financiación de las que ahora se ejecutan en la isla y que estará en funcionamiento a principios de 2023.

“Estas son las actuaciones que las administraciones públicas canarias deben priorizar para ampliar el escudo social y el bienestar de los más vulnerables. En La Gomera hemos abordado el reto de la atención sociosanitaria desde el convencimiento de que las personas dependientes necesitan una atención integral y de la mejor calidad”, subrayó Curbelo, quien adelantó que las prestaciones del nuevo centro serán “de las más avanzadas del país, puesto que incorporan equipos médicos y zonas para terapias”.

Centro sociosanitario vista interior según boceto de archivo

En cuanto al mobiliario, avanzó que se sacará a licitación de forma inminente, con una inversión inicial de 1,4 millones de euros, “con el propósito de que se pueda ir instalando al mismo tiempo que se acaba la estructura y así reducir plazos para su puesta en funcionamiento”. De esta forma, precisó que “dispondremos de más de 150 plazas de estancia residencial y 35 de estancia diurna que posibilitará atender a gran parte de la demanda actual”.

Apoyo a los mayores

Curbelo recordó que, de forma paralela, la Institución insular mantiene diversas líneas de cooperación con colectivos y proyectos dirigidos a los mayores y dependientes de la isla. El grueso de las inversiones en esta materia alcanzan los siete millones de euros, un 22% de las cuentas insulares, que recogen partidas para la atención sociosanitaria, apoyo a entidades y asociaciones sin ánimo de lucro, la atención domiciliaria y teleasistencia, así como las ayudas sanitarias y extraordinarias que anualmente se convocan.

“Estamos ante un contexto social en el que cobra mayor significado la redistribución de los recursos públicos más allá de las economías familiares, también en los más vulnerables, y las prestaciones que desde lo público se ponen a su disposición”, precisó.