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Curbelo pide la implantación de los corredores verdes en Canarias hasta alcanzar el máximo grado de inmunidad

Calle comercial

El portavoz del Grupo Parlamentario Agrupación Socialista Gomera (ASG), Casimiro Curbelo, defendió nuevamente su propuesta, este martes en sesión plenaria, para que Canarias se convierta en el primer destino en desarrollar una experiencia piloto de corredores turísticos seguros dirigidos a personas que se hayan vacunado o recuperado de la Covid-19, mientras se avanza en la vacunación para lograr el mayor grado de inmunidad.
No obstante, quiso aclarar que esta medida, que pretende reactivar los flujos turísticos, debe preservar en todo momento la salud de todos los ciudadanos. Por ello, destacó la relevancia de que cuente con el respaldo de los científicos, ya que todavía son muchas las dudas acerca del alcance de la inmunidad en diferentes supuestos. “Estas dudas se han acrecentado con la llegada de nuevas cepas, por lo que tenemos que ser cautelosos y estudiar en mayor profundidad la puesta en marcha de estos corredores verdes”, precisó.
Por ello, pidió a la consejera de Turismo, Industria y Comercio, Yaiza Castilla, que siga avanzando en las consultas oportunas a Sanidad que avalen la implantación de esta experiencia piloto. “Una medida que se podría implantar en primera instancia en La Gomera para trasladarla al resto de Islas”, indicó.
El portavoz de ASG recordó que Canarias fue la primera comunidad autónoma en promover, a través de un decreto ley, la realización de pruebas diagnósticas en el lugar de procedencia de cada turista, “y en este caso, las Islas serían también pioneras en establecer una medida que supone un empuje a nuestro principal sector económico”.
Para Curbelo, la solución más idónea para recuperar los flujos turísticos pasa por la vacuna, de tal forma que se logre la inmunidad recíproca, tanto en origen como en destino. “Esto es lo ideal, pero mientras esta situación no llega, debemos adelantarnos en la búsqueda de mecanismos que reactiven nuestro principal motor económico, ya que la vacuna va a un ritmo lento y nuestro tejido productivo necesita de mayores estímulos para sobreponerse”, comentó.
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