Prácticamente cualquier producto puede convertirse en soporte publicitario. Basta que se trate de un objeto de uso habitual y que permita que se visibilice bien la marca para que cumpla esa función. Si regalamos estos objetos a los clientes, conseguiremos quedar muy bien con ellos, y a su vez expandiremos nuestra marca. El objetivo que consiguen estos artículos es promocionar nuestra marca de forma natural, facilitar el recuerdo del cliente y fidelizarlos, puesto que se entregan gratuitamente. Por eso, el merchandising sigue siendo, años después de que algunas empresas empezaran a recurrir a él, una de las mejores técnicas promocionales.

El merchandising también permite distinguirte de la competencia. En un mercado cada vez más competitivo, diferenciarte de los demás es el camino hacia el éxito. Por eso, hay marcas que regalan a sus clientes un producto de alta calidad, o con algún detalle muy personalizado. Esto es un signo de distinción muy relevante, y contribuye a reforzar la buena imagen de la marca en el cliente.

De esta forma, una campaña de merchandising en la que la empresa regala un producto logra dos cosas. En primer lugar, reforzar su vínculo con el cliente, que recibe un regalo de la empresa. Y además, estará realizando una estrategia publicitaria, pues dará una visibilidad muy positiva a la empresa.

¿Qué artículos puedo regalar a mis clientes?

Cualquier cosa, siempre que sea útil y que a la vez cumpla el objetivo de visibilizar la marca, para lo cual conviene que sea de uso exterior. Por eso, cada vez vemos más productos que se regalan como merchandising. En la web https://www.maxilia.es/ tienes un listado amplísimo de todos los objetos sobre los que puedes colocar tu marca, y con los que quedarás estupendamente regalándolos a los clientes. Nosotros te damos algunas ideas:

  • Ropa: camisetas, sudaderas, delantales o gorras son algunos de los objetos de marketing más comunes. La razón es sencilla: todos nos vestimos todos los días, de modo que si regalamos a nuestros clientes una prenda de vestir es muy probable que la utilice. Así conseguiremos una buena difusión de marca. Otra idea, vinculada a la ropa: ¿unas gafas de sol?
  • Bolsas de tela: otro clásico del Son muy baratas, de modo que por apenas un par de céntimos puedes regalar a tus clientes un obsequio del que, seguro, van a echar mano en algún momento. Para ir a hacer la compra, para ir a la playa… Las bolsas de tela son un elemento muy socorrido, y cada vez más necesario ante las restricciones para el uso de bolsas de plástico. De esta forma, cada vez que vayan a hacer la compra, tus clientes usarán ese regalo tan útil que les hiciste, y a la vez pasearán tu marca por el supermercado.
  • Lápices de memoria: este producto ha entrado recientemente en el top del merchandising. Cumple a la perfección los requisitos para ello: es de uso cotidiano, útil, cada vez más barato y es un objeto que no se compra habitualmente. Por eso, cuando lo necesiten recurrirán a aquel lápiz de memoria que les regalaste. Además, se trata de un objeto que admite un amplio grado de personalización, lo que te permitirá lucirte con el diseño.
  • Y una idea veraniega: ¿qué tal un frisbee? Con él te asegurarás de asociar tu marca a un recuerdo positivo, porque frisbee significa playa, verano y vacaciones. Además, es un objeto donde el logo se visualiza perfectamente, lo que permitirá que todo el mundo en la playa se fije en tu marca.

Son sólo algunas ideas, pero si quieres más, solo tienes que visitar la web. Te sorprenderás con la cantidad de regalos baratos con los que promocionar tu marca y quedar estupendamente con tus clientes.