El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, ha valorado el Plan de Transición aprobado por el Consejo de Ministros sobre el inicio del desconfinamiento, y que recoge las demandas insulares sobre una desescalada singular respecto a otros territorios, permitiendo así la reapertura de varias actividades.

El acuerdo permite que la isla pase directamente a la fase uno del Plan a partir del 4 de mayo, fecha en la que se reactivará, con restricciones de aforo, el pequeño comercio, restaurantes con terrazas, alojamientos, actividades de pesca restringidas hasta ahora, así como los lugares de culto.

“Es una muy buena noticia que se haya tenido en cuenta las particularidades de islas como La Gomera, cuya situación de impacto del Covid-19 nos permite ir un paso más adelante que otros puntos que siguen teniendo un mayor riesgo”, aseguró Curbelo, quien destacó la predisposición expuesta por el Estado para atender esta realidad, que posibilitará la vigencia de las medidas de la fase uno, además de aquellas previstas en la fase cero con la salida individual a realizar deporte o pasear con los miembros del núcleo de convivencia.

El dirigente insular hizo hincapié en que la llegada de la nueva normalidad tiene que ir unida a la responsabilidad social y el cumplimiento de los protocolos sanitarios, con el uso de mascarillas, la distancia de seguridad y la implantación de restricciones en el aforo, que en el caso de las terrazas de los restaurantes sólo permitirán una ocupación del 30%. “Hay que actuar con serenidad y no bajar la guardia. Depende de nosotros el éxito de este proceso”, afirmó.

A juicio de Curbelo, esta decisión del Gobierno de España, solicitada, a su vez por el Cabildo de La Gomera, supone “el reconocimiento al trabajo realizado en la Isla”. “En este tiempo hemos aislado la Isla en el puerto y el aeropuerto, ha habido una coordinación de las administraciones públicas, un importante trabajo de los profesionales sanitarios y de los cuerpos y fuerzas de seguridad, se han proporcionado medios de protección, se ha registrado la cifra de cero contagios y ha habido un comportamiento ejemplar de la ciudadanía, todos estos factores nos llevan a esta decisión de entrar en la fase 1”, apuntó.

“A partir de ahora nos enfrentamos a que un ciudadano pueda abrir sus negocios, con las medidas de seguridad y los protocolos establecidos, o que los ciudadanos puedan acudir a los comercios y establecimientos, cumpliendo también los requisitos; empezamos, por tanto, una vida normal, que es lo que veníamos pidiendo y el Gobierno central ha aceptado, con la cooperación del Ejecutivo canario”, señaló el mandatario insular.