Ángel Fariña, secretario General del PSOE

Tras vivir un 8 de marzo donde La Gomera, así como el resto de nuestras islas, ha vuelto a expresar con unanimidad el derecho a la Igualdad de Género con motivo del Día Internacional de la Mujer, no debemos dar ni un paso atrás en la lucha contra la desigualdad de género. Debemos luchar por una sociedad justa e igualitaria, impidiendo que el bloque de derechas restrinja los derechos adquiridos a favor de una sociedad íntegra, hermanada y que pone su mira hacia el progreso como proyecto de Estado.

Trabajamos por una sociedad en donde el acento femenino se reconozca, respaldados por todas las políticas que desde la izquierda y desde el PSOE hemos puesto en marcha contribuyendo por un país más justo. Es necesario que se reconozca una voluntad de unión en cuanto a la igualdad de género, ya que aún tenemos por delante que combatir muchos problemas para lograr una igualdad real. Los últimos gobiernos de la derecha no solo recortaron los derechos sociales y económicos de todo el país, sino que se vieron especialmente afectados los colectivos marginados, como es el caso del protagonismo de la mujer en nuestra sociedad, así como en cualquier ámbito de nuestras vidas.

Por ello, cuando Pedro Sánchez accedió al Gobierno, el PSOE puso en marcha acciones y políticas con protagonismo femenino, en una campaña en donde decimos a la sociedad, que es “Tiempo de Mujeres”. Reconocer su aportación a la sociedad y a la vida personal de cada uno de nosotros y de nosotras no es sino avanzar en derechos y libertades, en un tiempo nuevo, en una España que se identifica consigo misma, la España que todos y todas queremos.

Desde el PSOE hemos impulsado en estos meses a nivel estatal, autonómico y local, una serie de medidas correctivas, así como leyes, que hagan desaparecer la injusticia que impide que se tenga realmente en cuenta la vida de las mujeres en su día a día, y más concretamente en el plano laboral. Apostamos por incluir la igualdad como eje prioritario en todas las áreas, desde la reforma constitucional hasta la lucha contra la violencia de género.

Los países con índices más elevados de participación equilibrada por sexos son países donde esta toma de decisiones conjunta ha llevado a un mayor desarrollo social y económico, por lo que debemos aprender de sus experiencias y no volver al oscuro pasado, donde el voto de una mujer estaba vetado. No dejemos que al menos la mitad de nuestra sociedad y de nuestro país se quede sin voz, sin opinión, sin derechos. Es nuestra responsabilidad dejar en el pasado políticas contrarias a la igualdad de género, políticas que den lugar a un retroceso histórico de una España actual, moderna, que mira de tú a tú. Es nuestra obligación ser pioneros a nivel europeo y mundial en la puesta en marcha del desarrollo de la igualdad en todos los ámbitos, pero más aún en la igual de género.

Debemos reflexionar ante las próximas elecciones, sin dejar el menor paso a una vuelta atrás que lleva consigo más de 40 años. Defendamos nuestra democracia y país desde la igualdad efectiva. Es nuestro deber.