Cruz Roja repartirá un total de 425.308 kilos de alimentos en la provincia de Santa Cruz de Tenerife destinadas a 15.549 personas sin recursos y especialmente vulnerables, de las cuales, 543 son lactantes. De ellos, 6.936 kilos serán repartidos en La Gomera en función a la demanda en esta Isla. 55.084 se repartirán en la isla de Tenerife, 55.296 en La Palma y 8.530 en El Hierro

La asociación humanitaria ha informado hoy en un comunicado de que los alimentos se distribuirán a 41 entidades benéficas, doce de las cuales son asambleas locales de Cruz Roja, y el resto ayuntamientos y asociaciones.

Los alimentos son de carácter básico, poco perecederos, de fácil transporte y almacenamiento.

La «cesta de alimentos» incluye 16 productos como arroz blanco, cacao soluble, cereales infantiles, conservas de atún y de sardinas, crema de verduras, galletas, garbanzos cocidos, judías verdes en conserva, leche de continuación en polvo y entera UHT, melocotón en almíbar, pasta alimenticia, tarritos infantiles de pollo y de fruta y tomate frito en conserva.

Son alimentos especialmente nutritivos que van a contribuir a satisfacer las necesidades de las personas adultas y, de manera especial, de los menores, añade.

Esta cesta ha sido elaborada con la colaboración de la Federación de Bancos de Alimentos, Cruz Roja y de expertos en nutrición de los Ministerios.

En total Cruz Roja repartirá 1.148.378 kilos de alimentos con las tres fases de repartos previstas dentro del programa 2017 de ayuda alimentaria, cofinanciado en un 85 por ciento por el Fondo de Ayuda Europea para las Personas más Desfavorecidas y en un 15 por ciento por el presupuesto nacional.

En su desarrollo colaboran los Ministerios de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad; Empleo y Seguridad Social; y Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

En lo que va de año Cruz Roja en la provincia tinerfeña ha atendido directa o indirectamente a 31.157 personas desde el área de Intervención Social, a través de sus más de 32 proyectos y servicios, dirigidos a la atención a los colectivos más vulnerables, como personas mayores, inmigrantes, personas con discapacidad, afectados por VIH-Sida, infancia y jóvenes en dificultad social, población reclusa y mujeres en exclusión social.

De este total, 5.202 personas han sido beneficiarias de medidas específicas en materia de emergencia social para la cobertura de sus necesidades básicas, tales como alimentación, pago de facturas de suministro eléctrico, alquileres, material escolar, ropa, entre otros. EFE