Palmeras de Guadá
Palmeras de Guadá

El comité local de Sí se puede en Valle Gran Rey señala que empiezan a ser palpables los daños ocasionados por la sequía en el palmeral de Guadá, sin que haya habido actuación por parte del Cabildo Insular para corregir esta situación.

El portavoz del Comité local, Guzmán Correa, declara que «en varias zonas ha habido pérdidas de ejemplares, sobre todo de palmeras asociadas a las acequias en las que hay poca actividad agrícola. La situación en la Cañada de Las Huesas, por ejemplo, es dramática y evidente, y se hace urgente una actuación para impedir más pérdidas en todo el valle».

A este respecto, desde el Comité local se recuerda que en el proyecto correspondiente a la actuación «Red de riego de Valle Gran Rey», realizado en 2008, se señalaba, por parte del Cabildo Insular, que las actuaciones a realizar, consistentes en la colocación de tuberías de riego, no iban a afectar a ningún ejemplar de las palmeras existentes, ya que el proyecto preveía garantizar el agua a los palmerales mediante riego por goteo.

Desde Sí se puede se recuerda que los ejemplares afectados se encuentran dentro del Parque Rural de Valle Gran Rey y dentro de la Zona de Especial Conservación «Valle Alto de Valle de Gran Rey», por lo que, además de la protección que tendría que hacerse por tratarse de una afección a una especie protegida por distinta legislación como es la palma canaria, «el Cabildo Insular, por tener las competencias, tendría que haber trabajado más en serio para evitar la pérdida de más ejemplares de palmeras en Guadá dentro de estos espacios protegidos».

«debería producir sonrojo que quienes demuestran una pasividad absoluta en la gestión de espacios naturales y del patrimonio natural, y en especial de los palmerales de la isla, se erijan en defensores de la palmera y de la miel de palma fuera de La Gomera».

«Con el incendio de 2012, los envenenamientos posteriores y enfermedades vasculares, y ahora la sequía, el palmeral de Valle Gran Rey ha perdido centenares de ejemplares en tres años, y la Institución que debiera velar por el mantenimiento de este patrimonio demuestra no estar capacitada para ello. Al palmeral de Valle Gran Rey sólo le queda verse afectado por el picudo que ya está en San Sebastián», afirma Correa.

Según el portavoz «debería producir sonrojo que quienes demuestran una pasividad absoluta en la gestión de espacios naturales y del patrimonio natural, y en especial de los palmerales de la isla, se erijan en defensores de la palmera y de la miel de palma fuera de La Gomera».

Para Sí se puede en Valle Gran Rey, «esto, desgraciadamente, es otro ejemplo más de lo que, en opinión de muchas personas en esta isla, va a pasarle al Parque Nacional si finalmente cae en las manos de quienes no han sabido gestionar los espacios naturales protegidos desde el 2003 cuando se les transfirió las competencias».