'Jaber', ejemplar de perro de agua español censado en San Sebastián de La Gomera

El Grupo de Gobierno del Ayuntamiento de San Sebastián llevará al próximo pleno de la corporación la nueva ordenanza reguladora de tenencia y protección de animales que pretende, además garantizar su salvaguarda, hacerlo compatible con la higiene, la salud pública y la seguridad de los vecinos del municipio.

Es por ello, que con esta ordenanza quedará limitado a un máximo de cinco animales la tenencia en viviendas, siempre y cuando se den las condiciones higiénicas para ello. Para ello, se creará el Censo de Animales de Compañía en el municipio y en el que será obligatorio su inscripción, además de estar identificados en todo momento mediante un microchip.

En cuanto a las responsabilidades, la ordenanza recuerda que el propietario de un animal es el responsable de los daños, perjuicios y molestias que ocasione a las personas, además de las emisiones de excretas en las vías y espacios públicos.

En este sentido, estarán obligados a recoger las deposiciones de los animales y depositarlas de manera higiénica en los contenedores de basura o en los lugares que el Ayuntamiento habilite para ello, calificando su incumplimiento como falta grave y que se sancionará con multas que pueden oscilar entre 120 y 800 euros.

Los animales vagabundos, abandonados o perdidos será recogidos por el servicio municipal que se termine al efecto o por entidades colaboradoras y si en el plazo de 10 días no han sido retirados se procederá a promover su cesión o adopción.

Además, la tenencia de animales exóticos o peligrosos queda condicionada a la autorización expresa del Ayuntamiento ante el que deberán acreditar que disponen de un alojamiento y medios para asegurar su bienestar, la imposibilidad de fuga y la seguridad de las personas.

La ordenanza tipificará, entre otras, como infracción leve la alimentación en la vía pública o zonas comunes de cualquier animal libre, además de circular por espacios o vías públicas sin utilizar correa o cordón resistente que permita su control.

Finalmente, se considerará una falta muy grave los malos tratos y agresiones físicas a los animales así como el abandono de los mismos.