Mutismo puro desde que la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE anunciara la pasada semana su decisión de apartar a Casimiro Curbelo,presidente del Cabildo Insular de La Gomera de sus listas electorales del mes de mayo y disolver también la Comisión Ejecutiva de la que era secretario General desde los primeros años 80.
Ese mutismo lo predijo ya el propio Curbelo el pasado viernes en el transcurso de una rueda de prensa celebrada en la Institución que preside para presentar el proyecto de una futura zona recreativa en el término municipal de San Sebastián. A las preguntas de los periodistas sobre su futuro político afirmó que “la próxima semana daría explicaciones”. Semana que está transcurriendo y aún hoy,sigue en silencio. Los que le conocen consideran que pocas veces este ‘animal’ político,ha aguantado tanto sin dar una declaración como la que se le espera. Ello es por tanto,síntoma de la trascendencia que le da a su decisión final.
Su gestión diaria le ha hecho en muchas ocasiones involucrarse hasta límites insospechados en los problemas personales de muchos ciudadanos buscando soluciones puntuales que a modo de agradecimientos y reconocimientos son aplaudidos en las urnas en cada contienda electoral pero también muy criticado por sus opositores
Es verdad que los acontecimientos se precipitan en el seno del propio PSOE. Si el lunes pasado se reunió la Gestora con los seis secretarios generales locales,los cuatro alcaldes socialistas,el senador y la portavoz del grupo insular de esta formación política en el Cabildo,este jueves,la Comisión Ejecutiva Federal ha convocado a todos los afiliados para explicar sus argumentos sobre la decisión adoptada. Estas circunstancias podrían estar aconsejando a Casimiro Curbelo mantener en un compás de espera su anuncio de incorporación a la nueva formación política ‘Agrupación Socialista Gomera (ASG),hasta después de ese determinante encuentro convocado por la Secretaría de Organización del PSOE . Será entonces cuando presente en ‘sociedad’ a ese nuevo partido creado en 2011,que tiene como logotipo: una chácara,un tambor gomero y una rosa roja.
En el seno del propio PSOE,hay quien todavía confía que no se lleve a cabo,justificando así,que un paso de esa característica permitiría a Curbelo salir “por la puerta grande que se merece tras tantos años de gobierno insular”,pero cada vez más muchas voces apuestan,que el actual presidente del Cabildo de La Gomera herido por una situación que a todas luces él entiende como incomprensible por parte de sus viejos compañeros,dará la batalla para reivindicar su continuidad al frente de la máxima institución de la Isla.
Mientras todo eso transcurre,la segunda parte de esta historia tiene que ver con la composición de las listas electorales municipales e insular en el seno del PSOE. Los plazos están marcados y según se apunta desde esa organización “no hay tiempo que perder”,ya que a pesar de todo lo sucedido,una vez se aprueben los nombres y las candidaturas,será nuevamente la Comisión de Listas la encargada de poner el punto y final sobre los candidatos,revisando caso por caso y comprobando que ninguno incumpla las normas establecidas,algunas de ellas incorporadas al nuevo código ético de esta formación política. Como no ha habido nominaciones por el momento,nada se puede decir ahora,pero a lo mejor…no está todo dicho aún en cuanto a validar candidatos con imputaciones de uno u otro sentido.
Pase lo que pase,nada será igual en La Gomera.
Corría el año 1982 cuando Curbelo poco tiempo después de su afiliación alcanzó junto a otros de su misma generación la Secretaría General del PSC-PSOE de su isla natal. Eran buenos tiempos políticos amparados por la reciente victoria de Felipe González,que pocos meses atrás había conseguido aquellos 201 escaños en el Congreso de los Diputados,que le elevaron al sillón presidencial de Moncloa.
Tenía Casimiro Curbelo –a punto de terminar su carrera de Filosofía y Letras– apenas 27 años y poco a poco avanzó políticamente hasta formar parte de la Comisión Ejecutiva Regional de Jerónimo Saavedra como Secretario General y miembro del Comité Regional de esta formación política en Canarias. Cargo que hasta hace unos días nunca dejó de pertenecer.
En 1983 resultó elegido para su primer cargo público. Accedió a la Alcaldía de San Sebastián de La Gomera sustituyendo a Juan Ignacio Sánchez Bernal y se mantuvo en el puesto apenas tres años más debido a que “la Sala de lo Penal de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife le condenó a la inhabilitación en dicho cargo durante un año. La sentencia estableció,que Curbelo fue autor de dos órdenes de detención ilegal dictadas en febrero y marzo del pasado año contra dos vecinos de la localidad,que se querellaron contra la autoridad municipal por considerarse víctimas de un abuso de poder. Curbelo,un socialista duro que goza de gran prestigio en dicha capital y en las filas de su partido –tal y como publicó el periódico El País en aquel momento– acató la sentencia aunque manifestó no compartirla”. Su popularidad a raíz de aquel incidente en vez de decrecer,aumentó aún mucho más. Y como casi siempre,en circunstancias difíciles se creció y amparado por su propia juventud no paró de gestionar,trabajar y acercarse a los ciudadanos en calidad simplemente de Secretario General del PSOE de La Gomera.
Así fue,que en 1986,resultó elegido diputado en el Parlamento de Canarias hasta el año 1991 y luego posteriormente repitió en este cargo entre los años 2007 y 2011. En 1991 también consiguió por mayoría absoluta y por primera vez,la Presidencia del Cabildo de La Gomera,cargo que ostenta hasta la actualidad con más o menos el mismo número de miembros en su equipo de Gobierno.
En 1993 resultó elegido también con amplia mayoría,Senador por su Isla,hasta que en el año 2011 tuvo que renunciar de esta responsabilidad por imperativo de la Federal del PSOE al haberse implicado en un desagradable suceso en un bar de copas en una zona de ocio nocturno en Madrid.
Nadie sabe a ciencia cierta en estos instantes,que consejeros le podrían acompañar en esta ‘travesía’ de final de legislatura. Quiénes de ellos abandonarán con él el Partido por el que se presentaron en las pasadas elecciones,haciéndolo por lealtad y también con sacrificio en lo que podría ser una de las decisiones más importantes de su corta o larga carrera política,según sea el caso. De cualquier manera,no será para ninguno de ellos una decisión fácil de adoptar.
Curbelo ha logrado ser junto al alcalde del municipio tinerfeño de Adeje,José Miguel Rodríguez Fraga uno de los políticos españoles con más amplio respaldo en proporción al número de habitantes de la jurisdicción por la que se presenta. Nadie discute que es un hombre emblemático con mucho carisma y cargado de una sensibilidad especial para ocupar un cargo público. Ha sabido llegar a sus ciudadanos de tal forma,que hasta este momento es incuestionado en las urnas.
Su gestión diaria le ha hecho en muchas ocasiones involucrarse hasta límites insospechados en los problemas personales de muchos ciudadanos buscando soluciones puntuales que a modo de agradecimientos y reconocimientos son aplaudidos en las urnas en cada contienda electoral pero también muy criticado por sus opositores. Pero es indiscutible que esta forma de gobernar ha ido anulando en cada ocasión a los diferentes grupos de Oposición que han coincidido con él en cada una de las últimas legislaturas. Algo que muchos no le perdonan y lo consideran un objetivo a batir por encima incluso de razonamientos o cuestiones meramente políticas
Respetado hasta hoy en el seno de su propia formación y también fuera de ella,ha formado parte de muchas de las grandes decisiones que han encaminado no solo el presente de La Gomera,sino también el inmediato pasado del Archipiélago Canario donde ha participado en foros de gran importancia que han tenido que ver con el transcurrir de la historia de la Comunidad Autónoma.
Casimiro Curbelo,al que se le supone consciente del paso que debe dar a partir de estos momentos,sabe el precio político que a nivel mediático le puede costar la entrega o la retirada de su carnet del PSOE. Inimaginable era hasta hace poco verlo ubicado en el propio Cabildo Insular en el Grupo de No Adscritos de la Corporación,junto a otros dos miembros que en su momento abandonaron el Partido Popular.
Nadie sabe a ciencia cierta en estos instantes,que consejeros le podrían acompañar en esta ‘travesía’ de final de legislatura. Quiénes de ellos abandonarán con él el Partido por el que se presentaron en las pasadas elecciones,haciéndolo por lealtad y también con sacrificio en lo que podría ser una de las decisiones más importantes de su corta o larga carrera política,según sea el caso. De cualquier manera,no será para ninguno de ellos una decisión fácil de adoptar.
Mientras todo esto pasa,a fecha de hoy ninguna fuerza política de La Gomera ha hecho público su respectivo o respectiva cabeza de lista electoral. Da la impresión de que lo que pueda hacer Curbelo marca pautas no solo en el propio PSOE,sino también en el resto. Y quizá a eso se esté esperando.
Los días venideros serán determinantes. Casimiro consciente de ello,se hace esperar,quizá desde el convencimiento que todavía hoy en la política de La Gomera seguramente le queda mucho que decir.
Napoleón Bonaparte dijo: “Actúo en política como en la guerra: distraigo a un flanco para batir al otro”. Quizá ésta sea su penúltima estrategia.
