Una encuesta de Celeste-Tel nos revela que Casimiro Curbelo obtendría mejores resultados en La Gomera si se presentara en solitario que haciéndolo bajo las siglas del PSOE.
Curbelo lleva desde la prehistoria ejerciendo el poder en La Gomera,una isla donde la política es tan clientelar y tan a pie de obra como en cualquier pueblo pequeño. En ese tiempo,el aprecio político de los gomeros por Curbelo no ha menguado.
En 30 años de ejercicio del poder,ha sido denunciado unas cuantas veces,ha tenido conflictos con vecinos,con otros poderes de la isla y con su propio partido,y se ha convertido en el principal patrón de La Gomera. Sin duda,es un personaje con luces y sombras,un genuino representante de un socialismo pegado a las necesidades y preocupaciones del común,un tipo rijoso y duro como el pedernal,con el que es mejor llevarse bien en La Gomera,y al que twitter y otros sucedáneos de la política virtual se la traen al fresco. Pero fue un caso probado de abuso de autoridad policial,trasformado por el periódico El Mundo en un mediático escandalete prostibulario,lo que desató la hipocresía de los suyos (y suyas),y le obligó a dejar el Senado en uno de los juicios paralelos más siniestros y repugnantes de los últimos años,al que los suyos (y suyas) se sumaron encantados.
Ahora anda el PSOE pensándose si aguanta el feo de llevarlo en sus listas. Y Curbelo sigue a la espera de la decisión. Un tipo curioso este Curbelo: otros habrían pasado ya de Ferraz.