La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) ha denunciado este viernes el «control» que desde ayer la Secretaría de Estado de Comunicación ejerce en las preguntas que se realizan en el Palacio de la Moncloa al presidente del Gobierno,Mariano Rajoy,y los mandatarios internacionales que le acompañan. Se rompía así el pacto que,a pesar de sus limitaciones (no más de cuatro preguntas),permitía a los periodistas acordar quién de ellos plantearía las cuestiones asimismo consensuadas en ese tipo de encuentros,y que se prolongaba desde hace 10 años.
Los sindicatos de periodistas consideran ahora que «el tradicional recelo del presidente del Gobierno hacia los periodistas,que le ha llevado en ocasiones a estar durante más de un mes sin comparecer ante ellos,ha dado un grave paso adelante». Recuerdan que ayer jueves,antes de una rueda de prensa de Rajoy y el presidente del Consejo Europeo,Herman van Rompuy,la secretaria de Estado de Comunicación,Carmen Martínez de Castro,comunicó a los periodistas que Moncloa rompe unilateralmente esa costumbre y,a partir de ahora,el Gobierno decidirá a qué periodistas de los que se han apuntado previamente da la palabra.
Así lo hizo Rajoy a continuación y «los periodistas comprobaron que el presidente señaló a un periodista para que le preguntara y le respondió mirando un papel que tenía en la mano,con lo que tuvieron la sensación de que que leía la respuesta que llevaba preparada»,afirma la FeSP en un comunicado. Los sindicatos consideran,así,que «Moncloa puede evitar,por ejemplo,que el periodista de un medio que haya publicado ese día informaciones críticas contra el Gobierno le pregunte sobre ellas,como ocurrió en julio pasado en pleno escándalo del caso Bárcenas».
Una «total falta de respeto» a los medios
A juicio de la organización sindical la práctica antes señalada supone «un ejemplo bien claro de falta de transparencia que contradice las afirmaciones del presidente y otros miembros del Ejecutivo cuando se refieren a la polémica e incompleta Ley de Transparancia que tramita el Parlamento». La FeSP rechaza así «estas prácticas de control de los informadores,que son contrarias a la libertad de información y no son propias de un sistema democrático».
«El afán del Gobierno por controlar los medios de comunicación,como se está viendo en RTVE,se extiende también a los privados,lo que demuestra en ambos casos una total falta de respeto a los medios públicos y privados y,en definitiva,a la ciudadanía que es la propietaria del derecho constitucional a la información»,concluye. Así,la FeSP hace un llamamiento al Gobierno para que «rectifique esa decisión y a los informadores para que continúen mostrando su protesta en esas ruedas de prensa»,como hicieron el jueves al levantar todos la mano de manera unánime para pedir la palabra,o negándose a acudir a las convocatorias de comparecencias del presidente sin preguntas.