DOMINGO NEGRÍN MORENO | Se las prometían muy felices cuando,durante el último debate de política general en el Parlamento,Paulino Rivero anunció un Plan de Empleo Social en colaboración con la Federación Canaria de Municipios (Fecam). Pero,a la hora de la verdad,los ayuntamientos se han encontrado con el engorro de tener que sufragar la mayor parte de la financiación del programa.
Unos 16 días después de la intervención del jefe del Ejecutivo en la Cámara regional,ayer se acabó el plazo para que las corporaciones remitieran a la Fecam la información requerida con el propósito de hacerla llegar al Gobierno a fin de determinar su aportación por municipio.
Con fecha del 3 de mayo,el presidente de la Fecam,Manuel Plasencia,envió una carta a los 88 alcaldes en la que detallaba las “líneas básicas del programa” urgente acordadas con el Gobierno. “Debido a las tremendas dificultades económicas y sociales por las que están atravesando familias canarias que se ven privadas de los medios imprescindibles para cubrir sus necesidades básicas”,escribe,“entiendo que los municipios no se pueden quedar al margen de esta situación”. Plasencia subraya que son precisamente los servicios sociales locales los que están haciendo frente a esta “grave” circunstancia. Por ello,señala,“se está negociando un programa extraordinario de empleo social para 2013 con el objetivo de fijar las bases para la colaboración” entre ambas administraciones.
Según consta en esa comunicación,consecuencia de varias sesiones de trabajo,se persigue “el desarrollo de tareas de utilidad social que redunden en beneficio de la comunidad y reduzcan el desempleo”.
En este marco,la Consejería de Empleo y los ayuntamientos “que se adhieran” a la iniciativa “financiarán la contratación de personas desempleadas por parte del Gobierno de Canarias,a través de sus entes instrumentales”.
El coste del proyecto se cubrirá mediante la creación de un fondo con aportaciones de las corporaciones implicadas y del Ejecutivo autonómico. Así,el Ayuntamiento contribuirá con una cuota que oscila entre 1% y 10% del Fondo Canario de Financiación Municipal,mientras que el Gobierno entregará una cantidad adicional equivalente al 50% de lo que aporte cada uno de los ayuntamientos incorporados.
Hay algunas diferencias con el plan de 2012,dotado con 12 millones. Por ejemplo,la subvención se repartió conforme a unos parámetros de población y el máximo concedido era del 15% de lo que resultaría de aplicar el criterio del número de parados.
El PP pedirá explicaciones en la sesión de control del martes.