La primera erupción volcánica que se ha producido en Canarias en el siglo XXI tuvo lugar en aguas próximas a la isla de El Hierro y fue precedida por cinco fases,recuerda hoy el Instituto Geográfico Nacional (IGN) con motivo del primer aniversario del inicio de la actividad que le dio origen.
Esta erupción en el Mar de las Calmas también ha sido la primera en la que el IGN,como responsable de la vigilancia volcánica en España,participa dentro del Plan de Emergencias para Riesgo Volcánico de la Comunidad Autónoma de Canarias (PEVOLCA).
La crisis sismovolcánica comenzó el 19 de julio de 2011 y durante la misma el Instituto Geográfico Nacional registró 12.503 movimientos sísmicos hasta el 5 de marzo de 2012 cuando se dio por finalizada tras emerger un volcán submarino que se quedó a unos 130 metros de profundidad.
El IGN destaca que son los datos obtenidos,además de permitir la gestión de la emergencia,se facilita la mejora del conocimiento del fenómeno volcánico en Canarias.
En esta investigación se han utilizado las técnicas geofísicas,geodésicas y geoquímicas adecuadas para realizar el estudio de la evolución y pronóstico de un fenómeno volcánico,y que son usadas en las zonas volcánicas activas mas importantes en el mundo,asegura el IGN.
La revista “Geophysical Research Letters” ha publicado un artículo firmado por más de treinta investigadores y técnicos del grupo de volcanología del IGN,en el que se explican y analizan los precursores que culminaron con la erupción en las proximidades del pueblo pesquero de La Restinga.
En el artículo se establecen cinco fases preeruptivas en función de la sismicidad y deformación,en la primera de las cuales se observaron pequeñas deformaciones que precedieron en unos días a la sismicidad del 19 de julio.
La segunda fase comprende el periodo de pequeños terremotos en la zona de El Golfo,en el norte de El Hierro,hasta principios de septiembre,y a partir de la tercera fase se observó una aparente migración de magma hacia el sur de la isla,donde está La Restinga.
La cuarta fase comenzó el 27 de septiembre con el aumento importante de magnitud de los seísmos que empezaron a ser sentidos ampliamente por la población,y el 8 de octubre (a las 21:34 horas) comenzó la quinta fase con el terremoto de magnitud 4.3 en la escala Richter a 12 kilómetros de profundidad y al oeste de La Restinga.
Este terremoto pudo desencadenar el ascenso de magma acompañado de una sismicidad superficial al sur del pueblo que concluyó con el inicio del tremor el 10 de octubre a las 5:10,momento que se considera como inicio de la erupción submarina.
Además de la sismicidad y deformación se observaron pequeñas anomalías en valores de radón y una zona de emisión de CO2 difuso durante la fase segunda,y también se registraron variaciones en el campo magnético relacionadas con la migración hacia el sur de la sismicidad y el incremento de magnitudes.
En el trabajo se destaca la importancia de estos datos para mejorar el sistema de vigilancia volcánica en España debido a que se trata de la primera erupción en la historia de Canarias que ha sido monitorizada desde su principio.