José Martín de la Pena reside en una casa que le cedió el obispo,a quien en su momento le bastó con pedir perdón por “los pecados” de su compañero,según publicó el Diario de Alcalá en mayo de 2010. Reig Pla justificó su decisión en la avanzada edad del cura.
El Supremo ratificó la sentencia contra el cura
La sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid que condenó en mayo de 2003 a José Martín de la Peña a 10 años de prisión y ocho de inhabilitación fue ratificada por el Tribunal Supremo en 2005. El cura abusó de una menor desde los 4 años hasta que cumplió los 13. Cuando la entonces joven cumplió los 18 años decidió denunciar al sacerdote.
“Don José me puso contra la pared…”
Todo comenzó en 1978 cuando José Martín de la Peña trabajaba en el Tribunal Eclesiástico de la calle Pasa en Madrid y alquiló una habitación a la madre de la niña,quien había solicitado nulidad matrimonial. Desde esa fecha hasta 1988 el cura abusó sexualmente de la menor,a quien impartía clases de matemáticas y con quien pasaba muchas horas. Según la denuncia de la joven,la violó en su propia casa,en el despacho del Tribunal Eclesiástico y en la casa propiedad de la diócesis de Alcalá que De La Peña ocupaba en la calle Santa María La Rica. En su relato,la joven contó cómo “en Alcalá… Don José me puso contra la pared,me abrió las piernas y me hizo lo que hacía siempre por detrás”.
El obispo alegó la avanzada edad de don José
Según dijo el obispo de Alcalá,José Antonio Reig Pla,tras la condena al cura “como a todos los sacerdotes,y atendiendo particularmente a la avanzada edad de don José Martín de la Peña,una persona ya octogenaria,el Obispado le facilitó una vivienda”,en la que puede “residir en los periodos en los que sale de prisión”.