Médicos sin Fronteras se ha visto obligado a retirar su ayuda en Misrata tras comprobar in situ las continuas torturas de presos gadafistas en las cárceles. Las fuerzas del Consejo Nacional de Transición (CNT) llegaron,incluso,a solicitar a los médicos que atendieran a los presos para poder seguir torturándoles. Increíble.
Ni es la primera vez que una organización humanitaria denuncia a las actuaciones del CNT ni tampoco que se desvelan las ejecuciones sumarias llevadas por éste. Y mientras,quienes pusieron al CNT en el lugar que hoy ocupa ni mú… una vez más. No crean que han movido ficha – o la moverán- con la misma celeridad que antaño. Ni una mala palabra,ni un mal gesto. Nada se escucha de Obama o Clinton,preocupados por presentar “un país que lidera al mundo en la educación de su pueblo” (risas enlatadas); ni de Cameron o Sarkozy,en Davos aplaudiendo al capitalismo,ni de,por supuesto,del presidente del Consejo Europeo,Aumba Baluba Ba Van Rompuy (por meterle algo de sustancia a este álma de cántaro). Nada.
Mientras,vemos cómo se embarga a Irán y con ello,las compras de petróleo al régimen de Teherán. Nada menos que al cuarto exportador del mundo y el quinto proveedor de la Unión Europea (UE) -para España,el segundo-. ¿Qué efectos tiene eso? Para empezar,el FMI ya ha advertido de que el embargo puede suponer un aumento del precio del petróleo del 20 al 30%. En segundo lugar,que Ahmadineyad ejecute su amenaza de cerrar como represalia el estrecho de Ormuz,por el que transita el 40% de las exportaciones mundiales petroleras por vía marítima.
Y en tercer lugar pero no menos importante,que hay que buscar alternativas de proveedor. ¿A quiénes baraja la UE? Pues fundamentalmente a Arabia Saudí y,adivinen: a Libia.
Cerramos el círculo. A buen entendedor,sobran palabras.