«Hasta ahora fui sometido a toda clase de salvamentos quirúrgicos. Nadie me consideró más interesante por eso,pero su éxito me salvó»,asegura el escritor para quien la enfermedad «es un camino incómodo,que lleva o no a la muerte con o sin rapidez».
«Ahora padezco un cáncer de difícil extirpación. Y estoy sometido,para tratar de librarme,a un largo puteo,que es igual que una guerra de la que soy el campo de batalla». ¿Con un doble aliado: la quimioterapia y la radioterapia?»,explica el autor.
«Hubiera preferido el quirófano como tajante campo de batalla. Soy mal aliado de mí mismo: impaciente,poco soportador e insoportable: la anestesia total es mi aliada. Las nuevas experiencias me llegan tarde. Trataré,con todo,de defraudar a la muerte una vez más: la última»,concluye el escritor.