Sebastián Franquis

El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Sebastián Franquis, ha denunciado este martes [25] en el Pleno de la Cámara regional la “grave crisis institucional” generada en el seno de Radiotelevisión Canaria (RTVC) por las decisiones del Ejecutivo autonómico de CC y PP que han provocado “la mayor quiebra de credibilidad y autonomía de la historia del ente público”.

Durante una pregunta parlamentaria al presidente del Gobierno, Fernando Clavijo, sobre la independencia de RTVC, Franquis alertó sobre una “deriva política alarmante” que pone en riesgo la independencia editorial y el carácter de servicio público que la Ley Audiovisual Canaria reconoce a RTVC como ente autónomo, dotado de independencia funcional respecto del Gobierno y de cualquier administración.

El portavoz socialista recordó que la Radiotelevisión pública debe estar “al servicio de la ciudadanía, no del presidente ni de su Gobierno”, y que garantizar su neutralidad constituye “una exigencia democrática irrenunciable”.

Franquis enumeró los acontecimientos que, a su juicio, han generado una situación “sin precedentes” en RTVC en pocas semanas. En primer lugar, criticó la convocatoria y el nombramiento del nuevo director de Medios y Contenidos, “un proceso opaco, escasamente publicitado y sin garantías reales de transparencia”. Un nombramiento al que se sumó la renuncia del director de Informativos, cuya dimisión —subrayó— “nos recordó algo esencial que su Gobierno parece dispuesto a ignorar: que la información pública no es un contenido más, sino un derecho fundamental que debe ser protegido”.

Para Franquis, la crisis se agravó con la dimisión de la Administradora General, “prueba evidente de una intervención política indebida desde Presidencia”. Una intervención que, para el PSOE, ha “quebrado la esencia misma de la autonomía del ente público. Es el modo Clavijo de hacer las cosas”.

También cuestionó la propuesta del Gobierno canario para nombrar un nuevo administrador general, “una persona con una trayectoria que evidencia afinidades políticas claras y que resulta absolutamente incompatible con la independencia que exige un cargo de esta naturaleza”.

En este sentido, incidió en que la neutralidad en los puestos directivos de RTVC “no es una opción, sino una obligación legal y democrática”.

Además, advirtió que los hechos recientes se enmarcan en un contexto “aún más preocupante”: la tramitación de una nueva Ley Audiovisual, “movimientos apresurados” en la estructura del ente, procesos selectivos sin transparencia y “señales inequívocas de control editorial” sobre los contenidos informativos. “RTVC no puede convertirse en un gabinete de Presidencia”, sentenció.

El portavoz socialista recordó que las denuncias no proceden únicamente de su grupo parlamentario. “Los trabajadores, los sindicatos y los profesionales que llevan décadas defendiendo la credibilidad de nuestra radio y televisión pública han alertado de la injerencia política y de los riesgos para la independencia informativa”.

Por este motivo, exigió al presidente del Gobierno que garantice públicamente la independencia, imparcialidad y pluralidad editorial de RTVC mediante mecanismos “claros, verificables y completos”. Entre estas garantías, reclamó procedimientos transparentes en los nombramientos, refuerzo del control parlamentario y un compromiso institucional firme para blindar al ente frente a presiones políticas y procesos de privatización.

“Cuando hablamos de información pública, no hablamos simplemente de contenidos. Hablamos de independencia, de imparcialidad y de pluralismo. Hablamos de libertad informativa. Hablamos, en definitiva, de democracia”, afirmó.