En el mismo centro de San Sebastián de La Gomera, en el mismo Parque de la Torre del Conde donde se encuentra el más emblemático edificio histórico de la Isla cerrado al público desde hace mucho tiempo; zona de paso asidua para todos y todas y de atracción turística para el visitante cuenta desde hoy con una ‘singular postal’.
Tres individuos sin cortarse un ápice extienden un tendedero y cuelgan a lo largo de su extensión entre dos árboles frente justo a la Torre del Conde una variedad de ropa –incluida interior– para que así lo que supuestamente estaba mojado o húmedo o sudado pudiera secarse al sol, aprovechando el día veraniego que disfruta hoy la capital insular.
Ni cortos ni perezosos, estos tres personajes que esperaban bajo la sombra de un árbol su cometido, comenzaron tiempo después a recoger sus pertenencias, desenganchar el tendedero y continuar su camino.
¿No sabemos que les pasaría si esa misma acción la hicieran entre los hierros de la Torre Eiffel de París, la valla del Palacio de Buckinham en Londres, la Puerta de Brandeburgo en Berlín o la Puerta de Alcalá en Madrid?
Aquí, no les ha pasado nada. La vigilancia no llegó y si lo hizo, tuvieron suficiente tiempo para que sus ropas se secaran ya que ya estaban recogidas.
Cosas así, no tienen que volver a pasar.
Foto : La Gomera Isla Colombina
