En los últimos años se están popularizando las fiestas de Halloween en algunos rincones de las Islas Canarias, y la Gomera no está siendo una excepción. Cada vez más gente se interesa por esta fiesta de disfraces, aprovechando que parece tener tanto en común con nuestro Carnaval. En la mayoría de los casos, el conocimiento que tenemos de Halloween proviene de la televisión y las películas estadounidenses, pero ¿cuál es la historia de esta festividad?

En realidad, Halloween no es una fiesta de los Estados Unidos, sino que se originó en las culturas celtas de las Islas Británicas. Halloween se llamaba originalmente ‘All Hallows Eve’, que en español se traduciría como la víspera del Día de Todos los Santos. La noche de Halloween estaba entonces –y está todavía– estrechamente relacionada con el día 1 de noviembre, en el que acudimos a honrar a nuestros ancestros en los cementerios y las iglesias.

Halloween y Todos los Santos, estrechamente relacionados

Todo evoluciona, y ahora podemos prepararnos para el 1 de noviembre adquiriendo rosarios, velas, figuras cristianas o Biblias en una tienda religiosa online como Holyart. Esta plataforma es uno de los principales distribuidores de artículos religiosos para las iglesias de Italia, Francia y España, así que, si quieres celebrar el día de Todos los Santos con los mejores productos religiosos italianos, los tienes al alcance de un par de clics.

Dejar que los niños jueguen la noche anterior con los disfraces, entonces, pasa a ser un preludio del 1 de noviembre, así que, en realidad, ayuda a que los más pequeños de la casa entiendan mejor esta festividad. Pero, para entenderla del todo, tenemos que remontarnos a tiempos aún más antiguos, ya que, como muchas otras festividades cristianas, Halloween tiene su auténtico origen en una tradición pagana.

Una fiesta pagana que se convirtió al cristianismo

Los antiguos celtas consideraban que, en la noche de Halloween, se desdibujaban las líneas que separaban el mundo de los vivos y el mundo de los muertos. Por eso optaban por disfrazarse con el aspecto de animales feroces para ahuyentar a los malos espíritus, y de ahí la tradición de los disfraces de Halloween. Las calabazas con caras maliciosas también tenían el propósito de proteger los hogares frente a estas malas influencias.

A la mañana siguiente, como nosotros, los celtas rendían culto a sus antepasados y los honraban, en una tradición que pasó a combinarse con el calendario de la Iglesia para ayudar a la conversión de los paganos en cristianos. Por eso es posible que la fecha original de Halloween tuviese lugar más cerca del Equinoccio, y que solo posteriormente terminara desplazándose al 30 de octubre.

¿Qué significado tiene en Canarias?

En Canarias, sin embargo, la fiesta de Halloween no parece ser heredera de la tradición celta, sino que proviene de manera directa de la influencia del cine norteamericano. Son muchas las películas que nos han mostrado la manera en que se celebra Halloween en los Estados Unidos, considerando que muchos de sus habitantes son descendientes de irlandeses y escoceses. Por eso, el cariz que han adoptado estas fiestas en Canarias es algo diferente.

En los Estados Unidos, Halloween pasó a convertirse en una fiesta más para comercializar, y por eso han surgido incluso tiendas enteras dedicadas a Halloween. Las fiestas en restaurantes, bares y clubes también aprovechan esta fecha como un evento comercial más, y, por supuesto, son muchos los pequeños comercios y las grandes superficies que incluyen una decoración ‘halloweenesca’ durante el mes de octubre para atraer a más clientes.

Una tradición inocua que, además, enlaza con nuestras raíces cristianas

Aunque mucha gente percibe Halloween como una fiesta foránea –algo que sin duda es–, lo cierto es que se trata de una fiesta que entronca con el calendario cristiano, y, además, se trata de una fiesta inocua. Las decoraciones de Halloween y las fiestas de disfraces son, simplemente, un complemento divertido que anticipa la fiesta de Todos los Santos, cuyo significado no se ha perdido ni se ve modificado por estas celebraciones.

Halloween puede suponer entonces una oportunidad para que los más pequeños tengan presente el día de Todos los Santos, una ocasión más para sacar a pasear los disfraces de Carnaval, y una buena manera de hacer que el mes de octubre sea un poco más divertido. Sea como sea, lo que está claro es que se trata de una fiesta que está llegando para quedarse, y son cada vez más quienes aprovechan para celebrarla en el archipiélago canario.