Imagen de obras en el cementerio de Hermigua

La  Federación Provincial de Entidades de la Construcción de Santa Cruz de Tenerife  (Fepeco) y la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) han presentado un recurso contencioso – administrativo al Ayuntamiento de Hermigua en La Gomera por una encomienda a la empresa pública Gesplan.

Las entidades señalan que la iniciativa ha sido aceptada «contra la resolución del Pleno del Ayuntamiento de Hermigua, de fecha 24 de abril de 2023, sobre Contratos Administrativos, que adjuntamos, para general conocimiento»

Según se señala en un comunicado remitido a esta redacción, «el Ayuntamiento ha hecho un encargo a la empresa pública canaria, Gestión y Planeamiento Territorial y Medioambiental (Gesplan), para la ampliación y mejora del tanatorio municipal, que incluye, entre otras mejoras, la dotación de una capilla. El proyecto, cuenta con un presupuesto de 1.622.026 euro y un plazo de ejecución de 12 meses. Una vez más, por parte de un Ayuntamiento –se señala–  se ha hurtado a la concurrencia de las empresas locales canarias, poder participar en una licitación pública abierta y competitiva, sin tener que mediar la encomienda a una empresa pública, que distorsiona los procedimientos normales establecidos en la Legislación vigente, haciendo excepcional, lo que tendría que haberse diligenciado de forma habitual, corriente y ordinaria» siempre según la información emitidas por las entidades de la construcción.

Se apunta que «con esta manera de actuar, demasiado habitual en Canarias, diríamos que exageradamente ocurrente y en este caso concreto, local, pero que se da también a nivel insular y autonómico, se sustrae del mercado la licitación pública que tiene todas las garantías de publicidad, transparencia y mejor precio, por encomiendas a empresas públicas, con precios más caros y procedimientos más opacos. Sencilla y claramente, se vulnera la competencia empresarial, estorbando y poniendo obstáculos a la actividad ordinaria de la iniciativa privada en el sector de la construcción, debilitando y haciendo peligrar la propia supervivencia de las empresas, por la competencia desleal que sufren, por quienes precisamente, deberían ser los máximos valedores para su fortalecimiento, que lo único que están consiguiendo es el robustecimiento del entramado público. Es decir, ellos mismos se lo guisan y se lo comen».

Por último, hay que recordar que acudir a medios propios, por parte de las administraciones públicas, tiene que ser en casos muy restrictivos y sólo en las competencias que tienen asignadas, que suelen ser muy concretas y para situaciones excepcionales, porque si no es así, se debe obrar, por el procedimiento establecido en la Normativa vigente, de publicidad y competitividad libre entre las empresas de la iniciativa privada.