El presidente de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC), Román Rodríguez, descartó ser candidato al Congreso de los Diputados en las elecciones del próximo 23 de julio (23J) al mismo tiempo que confirmó la apertura de negociaciones con CC y otros grupos de obediencia canaria para conformar una plataforma nacionalista de defensa de Canarias frente al serio riesgo de que se produzca una pérdida de derechos del Archipiélago, una recentralización del Estado y una involución en derechos y libertades con una mayoría conservadora en las Cortes Generales. El líder de NC afirmó que se queda al frente de la organización, con dedicación exclusiva, para reforzar la estructura interna del canarismo de progreso y coordinar el notable avance institucional logrado en los comicios del pasado 28 de mayo (28M) a nivel municipal, en los cabildos y con el mantenimiento de un grupo parlamentario de cinco escaños, a la espera del recuento del voto del exterior.

Román Rodríguez comunicó las deliberaciones de la ejecutiva o sábor, celebrado ayer miércoles en torno a los resultados obtenidos el 28M y la convocatoria de elecciones generales adelantada al próximo 23J, junto con tres de los cinco diputados electos el pasado domingo, Carmen Hernández, Esther González y Luis Campos.

Si las mayorías conservadoras que apuntan los análisis se concretan el próximo 23 de julio, el presidente de NC-BC aseveró que habrá un serio riesgo de que se produzca un intento de debilitar los derechos de Canarias y del estado de las autonomías para centralizar todo el poder en la Administración del Estado y un “retroceso” en derechos, libertades y servicios públicos.

Para evitar esta regresión, “queremos estar allí (en las Cortes Generales) para defender a Canarias y sus singularidades y eso significa defender nuestro Estatuto, el REF y su desarrollo, la presencia de Canarias en los Presupuestos Generales del Estado en los términos que nos corresponde, en la financiación autonómica, fundamental para la articulación del autogobierno; y para defender la democracia y los avances del autogobierno y del Estado autonómico·”.

Con este objetivo, NC ha abierto un diálogo con Coalición Canaria para volver a concurrir como en 2019 en una plataforma nacionalista y con otros grupos de obediencia canaria. De no fructificar, “no descartamos otros espacios de confluencia” con formaciones progresistas y, en último caso, en solitario; tal y como precisó.

Román Rodríguez se mostró partidario de repetir el programa electoral que NC y CC defendieron hace cuatro años para las Cortes Generales, de llevar a cabo un proceso de diálogo discreto y eficaz y sin hablar de candidaturas, en este inicio de conversaciones. Planteó la conveniencia de que el próximo lunes esté decidido ya que el tiempo para la formalización de la plataforma electoral nacionalista, u otro acuerdo, expira el próximo viernes, 9 de junio.

La dirección nacional secundó con aplausos la decisión de Román Rodríguez de no ser candidato al Congreso de los Diputados para dedicarse, de forma exclusiva, a sus responsabilidades como presidente del partido político. Tras reconocer que las tareas institucionales asumidas por los dirigentes y militantes tras cada proceso electoral deja en un segundo plano a la organización, “en esta ocasión habrá una dirección del partido potenciada” y centrada en las tareas de afiliación, refuerzo de las estructuras de gestión internas, de los estudios y tareas de formación y coordinación de la política institucional.

“Voy a estar en primera línea y no habrá asunto que afecte a Canarias, sea europeo, español o canario, pequeño o grande; donde la dirección del partido no vaya a estar respondiendo, haciendo propuestas, construyendo espacios para seguir avanzando y coordinando el importante avance institucional” logrado el 28M, advirtió el presidente.

Hasta el recuento del voto del exterior que comenzará el próximo lunes, NC-BC mantiene los cinco escaños de 2019 aunque con la cualitativa ausencia de Rodríguez. En el ámbito de las islas, avanza al lograr tres consejeros en el Cabildo de Fuerteventura, otros dos que se sentarán en la Corporación insular de Lanzarote y se revalida la Presidencia del Cabildo de Gran Canaria para un tercer mandato consecutivo.

A nivel municipal, base del crecimiento de Nueva Canarias, en 2019 en Gran Canaria se lograron 94 concejales y ahora 115, un aumento del 22,34%; más que los socialistas y los populares, destacó Román Rodríguez. “Ahora estamos trabajando para que, en el ámbito local de Gran Canaria y en el resto de las islas, el espacio” del canarismo de progreso se consolide en los gobiernos que se constituyan en las ciudades y municipios.

En Lanzarote, se ha pasado de dos a 13 ediles y, en Fuerteventura, crece hasta 12. En Tenerife aumenta de 10 a 25. En La Palma se mantienen seis, en La Gomera se pierde un representante y, en El Hierro, se desechó la posibilidad de presentar candidaturas.

En total, en toda Canarias, se ha pasado de 128 concejales a 175 representantes municipales, un 36, 71% más. Rodríguez observó que su ausencia del Parlamento “no puede apantallar que hemos resistido” en el Legislativo, avanzado en los cabildos y ser determinantes como fuerza municipalista.

Lamentó que el proceso electoral del 28M en el Archipiélago, como en el resto de los territorios, se contaminara de la “terrible, cruda” confrontación vivida en la política estatal entre los grandes partidos políticos. Lo que se tradujo en Canarias, según detalló, con cuatro escaños en el Parlamento para la extrema derecha, otros tantos para el PP y dos menos para el PSOE.

En paralelo, expresó alegría al conocer que las negociaciones en curso entre la segunda y la tercera fuerza política en las islas para conformar una mayoría en el Gobierno de Canarias “no cuenten” con Vox. Mostró el deseo de que se replique esta misma decisión en los cabildos y ayuntamientos.  “Hay que combatir a la extrema derecha, defendernos frente a la intolerancia”, invocó el presidente del canarismo de progreso.