El pasado viernes, 26 de noviembre se ha procedido a comunicar el cierre cautelar de la parroquia de los Santos Reyes, en Valle Gran Rey, así como de sus dependencias anexas “debido a las dificultades para garantizar la seguridad que presenta por deficiencias en la estructura, motivadas especialmente por la carbonización de los pilares», según señala ‘Nivaria Digital’ de fuentesr del Obispado, atendiendo a la comunicación del arquitecto técnico superior, que adoptó esta medida.

En este sentido, «se prohíbe el acceso al edificio hasta que se estudie por la oficina técnica del Obispado la solución más oportuna para intervenir en orden a garantizar la seguridad y sea ejecutada la obra que proceda»

Este fin de semana no habrá culto ni otras actividades pastorales en las citadas dependencias. Según informó el párroco, Arturo Hernández, las eucaristías se trasladan, provisionalmente, a la ermita de Carmen, la de la Milagrosa, y a la parroquia de San Antonio de Padua (Guadá) y quedó suspendido el culto y el resto de las actividades pastorales en las citadas dependencias.

«En próximas fechas se establecerá el lugar donde se van a desarrollar otras actividades como es la catequesis, reuniones, etc», se señala en el comunicado.