Los tres consejeros socialistas analizan su primer trimestre de trabajo político en la oposición como “serio y positivo”, además de necesario,  para fiscalizar la gestión de un Grupo de Gobierno, cuya gestión “deja mucho que desear”.

Fue el pasado mes de junio, cuando el PSOE de La Gomera entró de nuevo en la Corporación Insular con tres consejeros. Tras un trimestre de trabajo de oposición “serio y riguroso”, los consejeros socialistas ven “más que necesario, para la salud democrática de la política insular, una oposición firme que contraste y valore la gestión diaria de los consejeros del Grupo Insular, nuevos y sin experiencia política en un gran porcentaje para tan alta responsabilidad”.

Ángel Fariña, Inmaculada Rodríguez y José María Morales intentan –desde su puesto de grupo político de la oposición- luchar contra una gestión “a todas luces, mejorable” en el Cabildo de La Gomera. “No es fácil ser hoy del PSOE en esta isla por los vaivenes políticos que ha experimentado nuestro partido, pero 140 años de historia son un bagaje demasiado importante para este país y, en concreto, para esta isla, bajo cuyas siglas, se ha modernizado la isla de La Gomera en servicios e infraestructuras tan importantes para su desarrollo como la modernización y ampliación del Puerto de San Sebastián en diversas fases, la construcción del Puerto de Valle Gran Rey, la ampliación del de Playa de Santiago, el Aeropuerto o el nuevo Hospital Insular así como la mejora de la red de carreteras, entre otras obras y servicios, con el esfuerzo de tantos y tantos cargos socialistas a lo largo de más de treinta años”. Es por ello que los tres consejeros trabajan con rigor y “con el escaso tiempo que nos permiten nuestros trabajos”, para conseguir mejorar la vida y proyectos que se aprueban y se gestionan desde su Gobierno Insular.

En las sesiones plenarias habidas hasta el momento, los consejeros han realizado preguntas de interés sobre la gestión del Gobierno insular como la necesidad de cumplir el protocolo de contar con el personal sanitario necesario en los Hogares de Mayores gestionados por el Cabildo como el de Alajeró y Hermigua, se han mostrado vigilantes para que se lleve a cabo el estricto cumplimiento de los acuerdos del convenio del personal del Cabildo, se han interesado por la precaria gestión con la red de monumentos colombinos (en algunos casos, cerrados y en otros, en un total descuido), además de interesarse por servicios en manifiesta dejadez administrativa como la encomienda del Módulo Insular de Servicios Sociales, además de la situación de diversas obras públicas y proyectos ya iniciados o en parálisis administrativa como el Auditorio Insular o el Audillón de la capital colombina.

De la misma forma, los consejeros socialistas se muestran preocupados por el inexistente modelo económico  de planificación insular, la gestión del turismo y su previsión para años venideros, o la escasa oferta cultural que padece la ciudadanía gomera durante casi todo el año, empeorado por la inexiste infraestructura cultural adecuada, que posibilite traer a la isla oferta cultural del circuito profesional en recinto cerrado.

La oposición en una línea positiva y efectiva para La Gomera es importante para el Grupo Insular del PSOE, que  ha votado a favor de mociones para el reconocimiento del trabajo de los bomberos en el incendio de Gran Canaria o del impulso del silbo gomero, pero también, aportando propuestas que las mejoren, como las realizadas en la moción, llevada en el último pleno, de apoyo al sector de los oficios artesanales tradicionales, aportando mejoras significativas en su apuesta por la defensa del sector y tradiciones.

El cambio del nombre del Auditorio Insular con una comisión evaluadora y participativa popular ha sido otro logro importante del trabajo del Grupo Insular del PSOE, iniciativa ésta muy bien recibida por la población gomera. De esta forma, los consejeros socialistas manifiestan “seguir firmes es en una labor de oposición constructiva  por el bien de La Gomera”.