Mercadillo de Valle Gran Rey

La asociación de artesanos Tacalcuse denuncia la falta de respeto, desidia y abandono “total” por parte del Ayuntamiento del mercadillo de Valle Gran Rey. 

La asociación recuerda que el Ayuntamiento de Valle Gran Rey no acaba de adjudicar los puestos que deberían haber estado concedidos a principio de este año, lo que crea gran confusión en los pagos y angustia e inseguridad a los posibles concesionarios.

El único mercadillo reglado y con antigüedad en La Gomera es el que se celebra todos los domingos en la plaza Lomo del Riego, en Valle Gran Rey, que se ha convertido en un atractivo turístico muy importante para el municipio y para toda la isla.

Sin embargo, Tacalcuse advierte de la nula gestión, del serio deterioro que sufre el mercadillo con rotura de estructuras, falta y mal estado de material, problemas con los cuartos de baño, el cierre del bar, falta de limpieza, sin restablecer el wifi, prohibición de música ambiental y dificultades graves de accesibilidad y seguridad, entre otras muchas carencias.

Además, el Ayuntamiento ha quitado durante los últimos domingos el vigilante de seguridad, lo que impide a los usuarios acceder a su hora al cuarto donde se guarda el material, retrasa las labores de montaje y provoca inseguridad.

Pero quiere dejar claro que lo que realmente solicita es más presencia y responsabilidad del Ayuntamiento, que cumpla sus deberes y que de una vez por todas muestre su apoyo y respeto.

La asociación también denuncia la verdadera “tomadura de pelo” del alcalde, Ángel Piñero, al asegurar que las adjudicaciones se iban a aprobar este martes en Junta de Gobierno, algo que no ha sucedido.

Tacalcuse recuerda que ha advertido al Ayuntamiento de forma reiterada de que la ordenanza reguladora del mercadillo incluye puntos totalmente discriminatorios y anticonstitucionales.

Por ello, rechaza rotundamente los criterios de adjudicación que recogen hechos tan graves y discriminatorios como premiar a las mujeres jóvenes del municipio en detrimento del resto  o que se castigue a los no residentes.

Reclama que estos criterios se basen esencialmente en la calidad artesanal del producto y pide que en ningún caso un revendedor pueda tener más ventajas que un artesano residente en cualquier municipio de la isla.

La asociación solicita a las administraciones públicas que prioricen la presencia de los artesanos de La Gomera en todas las ferias y mercadillos de la isla.

Recuerda que son pocos los artesanos de la isla en activo que elaboran productos singulares y de calidad, y que participan de forma continuada en eventos que se desarrollan en La Gomera a lo largo de todo el año.

Considera que estos oficios deben ser protegidos y salvaguardados al tratarse de manifestaciones culturales, artísticas y únicas que no generan problemas con los comercios, al contrario de lo que ocurre con la reventa.

Tacalcuse apunta a la importancia de que el artesano pueda vivir de su trabajo, para lo que necesita la implicación decidida de las administraciones públicas, que deben facilitar su presencia, generar nuevos mercados en sitios turísticos, y potenciar y mejorar los existentes.

Según la Ley de Artesanía de Canarias, las administraciones públicas deben promover la creación y el desarrollo de los cauces de comercialización necesarios para conseguir que la artesanía sea económicamente rentable, de forma que, siendo una actividad tan importante desde el punto de vista social y cultural, pueda mantenerse.