Alejandro García Vera

El pasado 13 de marzo se emitía una nota de prensa en la que el Ayuntamiento de Vallehermoso, por boca de su alcalde, Emiliano Coello, anunciaba la adjudicación de la redacción del proyecto de reforma y mejora de la Plaza de Chipude. A lo largo de toda la nota se explican las bondades del encargo de remodelación del citado espacio al que cada 3 ó 4 años se le somete a reformas, sin que parezca que se dé con la clave para lograr funcionalidad y estética adecuada al entorno al que pertenece.

Para la asamblea local de Sí se puede en Vallehermoso es necesario que en esta ocasión se tenga en cuenta la opinión de las personas que viven en el pueblo, así como de los comerciantes que desarrollan su actividad en ella y, por qué no, de un grupo considerable de la ciudadanía gomera, ya que la plaza de Chipude es un enclave característico de la zona alta de la isla.

Para el portavoz de la asamblea local, Alejandro García Vera, “es necesario que se acometan mejoras, pero estas no pueden pasar sin tener en cuenta a la opinión de los interesados y usuarios, que son quienes mejor conocen las necesidades y las carencias, de lo contrario se puede derivar en una obra que lejos de mejorar, se deba volver a reformar”.

“Según creemos no se pueden hacer mejoras en espacios públicos cargados de tanto simbolismo sin tener en cuenta a las personas que más lo conocen: la gente de Chipude en este caso” continúa García Vera. “De hecho, creemos también que las administraciones públicas deben hacer un uso constante de herramientas de participación ciudadana y vemos que ni el ayuntamiento de Vallehermoso ni el resto de administraciones gomeras están trabajando en este sentido”.

Las últimas reformas que se acometieron sobre la plaza de Chipude tuvieron lugar en 2014 con fondos derivados de las ayudas tras el incendio de 2012. Asimismo, durante el año 2017 se realizaron mejoras en el parque infantil que se sitúa en la plaza y, cuya ubicación, según la nota de prensa emitida por el Ayuntamiento, puede cambiar. “Si llegara a ocurrir esto, es una demostración palpable de una auténtica ausencia de planificación. Por eso se hace preciso hacer consultas públicas, para que la ciudadanía no llegue a considerar que se le toma el pelo y de que se sienta partícipe de la vida de su barrio más allá de las elecciones” matiza el portavoz.

Sí se puede quiere recordar que el pasado 1 de febrero se proyectó la reforma prevista con la demolición del Parque Infantil de Vallehermoso, de una manera informativa, pero no participativa, mismo proceder con el que se han planteado y desarrollado las distintas reuniones que han mantenido en los barrios.

“Nos parece importante que se hagan reuniones vecinales para informar de proyectos, pero creemos que carecen de un fundamento básico que es la participación. Estar gobernando no significa solo tomar decisiones ejecutivas, también debe informarse a la ciudadanía y, respectivamente, consultarse sobre aspectos de interés general” afirma el portavoz.

Desde Sí se puede se insta al equipo de gobierno municipal a que en la elaboración de los proyectos se contemple la participación ciudadana, citando como precedente el ocurrido en el año 2004 cuando se reformó la Plaza de la Constitución en el casco, donde la ciudadanía valoró y votó por un proyecto. “Entendemos que esto puede retrasar determinadas actuaciones, sin embargo, por un principio democrático y por un principio de responsabilidad gobernativa, se hace preciso que haga partícipe a la ciudadanía, puesto que es a quien va dirigida la mejora, quien la financia con sus impuestos y quién disfrutará o sufrirá de ella” manifiesta García Vera.