El Consejo Canario del Movimiento Europeo (CCME),asociación privada de la sociedad civil que tiene como principal finalidad revisar la Unión Europea (UE),celebrará foros de debate ciudadanos en Tenerife,La Palma,Fuerteventura,Lanzarote,El Hierro y La Gomera.
La programación ha comenzado hoy con la celebración en el Parlamento canario de un foro ciudadano titulado «Canarias y la UE 2015. Año del Impulso Europeo»,en el que representantes de los distintos sectores sociales,económicos y culturales de las islas han reflexionado sobre lo que se puede esperar de las relaciones de Canarias con la UE.
En La Palma,el 26 de febrero,se hablará sobre agricultura sostenible; en Fuerteventura,el 19 de marzo,de los proyectos de cooperación y desarrollo social con el África más cercana; y en El Hierro,el 24 de abril,se disertará sobre el viento como energía del futuro.
En Lanzarote,el 7 de mayo,se debatirá sobre turismo integrador; y por último,en La Gomera,el 19 de junio,de protección del territorio y de endemismos.
El eurodiputado del PSOE Juan Fernando López Aguilar,el eurodiputado del PP Gabriel Mato,el presidente del Cabildo de Lanzarote,Pedro San Ginés,el de La Gomera,Casimiro Curbelo y representantes de la UE,son algunos de los participantes que se barajan para estos foros.
El presidente de la Cámara,Antonio Castro,ha destacado que el archipiélago es la lanzadera ideal para el impulso de programas de cooperación con África y América.
Castro ha señalado que el CCME supone «un nuevo impulso» para la construcción europea,basada,a su juicio,en la solidaridad y en la cohesión entre los países miembros.
El vicepresidente del CCME,José Miguel Ruano,ha asegurado que la organización se mantenga con menos de cien mil euros al año,lo que no impide que mantenga vivo el espíritu europeo mediante la celebración de los foros.
El Consejo Canario del Movimiento Europeo tiene la finalidad de aportar ideas,experiencias y hacer llegar a todos,instituciones europeas,instituciones nacionales,sector económico,sociedad civil y a los ciudadanos interesados en la Unión Europea. EFE