No ha sido tanto como en 2013,cuando en la gasolinera de José Miguel González,en el sur de Tenerife,se vendió completo el segundo premio de la Lotería de Navidad y se repartieron 200 millones de euros,pero se le parece: «Es increíble,estamos muy contentos»,ha comentado.
Esta vez el segundo premio,el 92845,ha estado muy repartido,y en la máquina de la gasolinera de González en Granadilla de Abona se ha vendido solamente un número,diez décimos despachados que han dejado 1.250.000 euros.
José Miguel González dice que no tiene ninguna explicación para esta coincidencia,dos años seguidos vendiendo el segundo premio,y confía en que en adelante la suerte seguirá sonriendo.
Como los décimos se han despachado en máquina,ni el dueño ni los empleados de la gasolinera han resultado agraciados y de momento ningún afortunado se ha acercado a repostar.
José Miguel González atesora además una curiosa anécdota del premio del año pasado,previa a cualquier anuncio de televisión.
Desde unos años antes,solía intercambiar décimos con un conocido que pasaba por la gasolinera,pero el año pasado,el día del sorteo,aún no había pasado a recoger los suyos,entre los que había uno premiado con 125.000 euros.
José Miguel González guardó el décimo y se lo entregó al amigo una vez ya celebrado el sorteo. Como Antonio. EFE
