Eduardo Suárez.- El entorno del Rey ha ejercido presiones en los últimos días sobre directivos de varios periódicos y sobre quienes han filtrado los últimos correos de Iñaki Urdangarin. Así lo desvela este viernes 'The New York Times' en un largo artículo sobre los escándalos que sacuden desde hace meses a la Casa Real.
El diario neoyorquino asegura que «el Rey y sus cortesanos han estado trabajando de un modo agresivo» para contener el daño del prifeso judicial del esposo de la Infanta Cristina y apunta a Don Juan Carlos,sus auxiliares y los servicios secretos españoles como las personas que han ejercido presiones sobre los responsables de algunos medios para rebajar el tono de la cobertura de la corrupción. El artículo dice que directivos de los diarios 'ABC' y 'El País' han negado que hayan recibido presiones en los últimos días.
El reportaje del diario neoyorquino está firmado por la periodista Doreen Carvajal,que tambien firmó hace unos meses una historia sobre la fortuna y las amistades peligrosas del Monarca. Esta vez hace un repaso por los detalles más relevantes del escándalo del Instituto Nóos y subraya los esfuerzos de la Casa Real por mantener al entorno del Rey lo más lejos posible del escándalo.
'The New York Times' cita los correos electrónicos publicados por la prensa española en los últimos días y asegura que tiene en su poder otros que indican que la Casa Real conocía lo que se cocía en Noos al menos desde 2004: dos años antes de la fecha en la que el Rey ordenó a su yerno que abandonara la fundación.
Tráfico de influencias
Los correos electrónicos sugieren que el entorno del Rey empezó entonces a presionar a Urdangarin para que se buscara un trabajo lejos de Nóos y el diario neoyorquino cuenta que la amiga del Rey,Corinna Zu Say-Wittgenstein intercedió para conseguirle un empleo como responsable de una sucursal española de la Fundación Laureus. «Hemos estado sufriendo la publicación permanente de artículos de prensa no siempre precisos sobre nuestras vidas privadas y profesionales»,se queja el yerno de Don Juan Carlos en uno de sus correos a Corinna.
El diario neoyorquino recuerda que Corinna se ha descrito a sí misma como «amiga y consejera sin sueldo del Rey» y ha negado «las informaciones que le atribuyen una relación romántica con él en la prensa española».
'The New York Times' asegura que fuera Monarca quien le encargó a Corinna que le encontrara un nuevo trabajo a Urdangarin. Preferiblemente en una compañía internacional que tuviera que ver con el deporte. La búsqueda empezó en junio de 2004 y se hizo van la supervisión del jefe de la Casa Real Alberto Aza. «Te envío el currículum que pidió su Majestad. Espero recibir pronto noticias positivas»,escribió Urdangarin en un correo a la amiga de su suegro.
El diario neoyorquino recuerda que las Infantas y la Reina comparten un fondo de 260.000 euros a cuenta del contribuyente y asegura que ese dinero no era suficiente para aguantar el tren de vida de la familia Borbón-Urdangarin. El trato sugerido por Corinna era colocar al esposo de la Infanta al frente de una sucursal española de la Fundación Laureus: una actividad que le obligaría a asistir a reuniones una o dos veces al mes y llegaría a reportarle cerca de 200.000 euros al año. Urdangarin rechazó el empleo en 2005. Cuatro años después,la Casa Real anunció su fichaje por Telefónica.