Poco a poco los vecinos del municipio de Valle Gran Rey intentan volver a retomar la normalidad de sus vidas,en la medida de lo posible. Cientos de residentes en este pueblo de la Isla Colombina trabajan a diario para que el núcleo vuelva a ser el mismo después de que en la madrugada del pasado lunes se viera arrasado por las llamas. En total,se ha contabilizado la pérdida de unas 40 viviendas,al igual que muchos pajares y cosechas calcinadas.
La virulencia y el rápido avance de las llamas hicieron a los vecinos de este pueblo volver a años atrás,concretamente a 1978,cuando Valle Gran Rey también se vio envuelto en un gran incendio. La casualidad ha hecho que las zonas abrasadas en aquel momento sean las mismas que han ardido durante estos días.
Uno de los vecinos que ha estado ayudando en las labores ya lo hizo,también,en el incendio anterior. Recuerda cómo en la madrugada del 25 de julio,a consecuencia de un problema en el tendido eléctrico saltaron unas chispas que hicieron que el pueblo estuviera en llamas durante varios días. Las zonas afectadas en aquel momento más o menos fueron las mismas,desde El Altito hasta el colegio de Guadá. “En aquel momento,fue el choque de dos cables eléctricos el que provocó las chispas,que se extendieron rápidamente por el cañaveral,aunque no tuvimos tampoco que lamentar pérdidas humanas”,comenta un vecino de Valle Gran Rey.
Durante esa noche,muchas personas también tuvieron que dejar atrás sus casas,como el lunes pasado,por el rápido avance del fuego.
Ese incendio,el más importante de la historia del municipio,hasta la fecha,se llevó por delante diversas viviendas,tierras de cultivo y ganado.
Esa historia se ha repetido con el paso de los años. Desde el viernes los residentes de este municipio comenzaron a sufrir los desalojos -como ha ocurrido con otras localidades cercanas-. Los primeros en abandonar sus casas fueron los de Las Hayas -que aún no han podido regresar por la cercanía del fuego- a los que le siguieron los residentes en Arure,Guadá,Los Granados y Casa de la Seda. Finalmente,el martes,tras sofocar el fuego y de sufrir una noche de auténtico infierno,los evacuados pudieron regresar a sus casas.
En la historia de La Gomera ya se han dado en varias ocasiones incendios de elevadas dimensiones. De hecho,en el año 1984 perdieron la vida en la zona del Roque Agando una veintena de personas,lo que ha provocado que sea por sus dimensiones el más dramático.
Aún así,algunos ya tachan al incendio actual,que lleva 12 días ardiendo -y no se espera de momento su control- como el que más ha afectado a la Isla,por el número de hectáreas quemadas.