El enorme crucero volcó frente a la isla toscana de Giglio tras golpear una roca el 13 de enero,lo que causó la muerte de al menos 25 personas. Siete pasajeros aún se encuentran desaparecidos.
Fiscales han acusado al capitán Francesco Schettino de causar el desastre al llevar al Costa Concordia -de varios pisos y con 4.200 personas entre pasajeros y tripulantes- demasiado cerca de la costa.
El primer oficial del barco,Ciro Ambrosio,y otros siete funcionarios y ejecutivos de la empresa dueña de la nave,Costa Cruceros,también están siendo investigados.
«Esa noche,Schettino había dejado sus gafas de lectura en su camarote y pidió a Ambrosio en reiteradas oportunidades mirar el radar para comprobar la ruta»,dijo a Reuters el abogado de Ambrosio,Salvatore Catalano,citando el testimonio de su cliente ante los jueces.
Ambrosio había dicho eso a los magistrados sobre Schettino,de 51 años,en audiencias previas,agregó Catalano.
Schettino ha afirmado que la roca con la que chocó el crucero no figuraba en sus cartas de navegación y ha reconocido que llevó el barco demasiado cerca de la costa,pero asegura que no es el único culpable de la tragedia.
Catalano sostuvo que su cliente fue el único funcionario en el puente del barco en adelantarse y ordenar la evacuación antes de que el capitán se decidiera a hacerlo él mismo. «Ordenó que se colocaran los botes salvavidas en el mar desde la cubierta número cuatro»,comentó Catalano.
Catalano realizó sus comentarios desde la ciudad toscana de Grosseto,donde el sábado tuvo lugar una audiencia previa a un juicio sobre el desastre.
Ninguno de los que están siendo investigados asistieron a la audiencia,realizada en un teatro para que pudieran asistir cientos de familiares de víctimas,sobrevivientes y abogados de todas las partes involucradas.
CAMPAÑA DE MEDIOS
El abogado de Schettino,Bruno Leporatti,no habló sobre las últimas acusaciones emitidas por el primer oficial contra el capitán,que ya ha sido condenado y ridiculizado en todo el mundo.
Sin embargo,denunció lo que llamó una campaña de los medios de comunicación contra Schettino y reiteró que su cliente había informado constantemente a los ejecutivos de Costa Cruceros sobre lo que estaba sucediendo en la nave.
«Ha habido una campaña de medios de comunicación para denigrar al capitán Schettino,pero no se va a rendir ante eso (…) Todo es parte de esta idea de que Schettino es el malo,el sucio y el feo,lo cual es absolutamente falso»,dijo Leporatti en una rueda de prensa.
Schettino se enfrenta a una serie de cargos,incluyendo homicidio múltiple y abandonar el crucero de 114.500 toneladas antes de completar la evacuación de todos los pasajeros y tripulación.
Se encuentra bajo arresto domiciliario en su casa en Meta di Sorrento,cerca de Nápoles.