M. GÓMEZ.- Tres años no han sido suficientes para que la mayoría de las guarderías de Canarias reúna las condiciones adecuadas para convertirse en escuelas de educación infantil. El Gobierno regional tiene previsto aprobar mañana una prolongación del plazo -que en principio concluye el próximo 31 de agosto- para evitar así que muchos de estos centros tengan que cerrar sus puertas.

Las guarderías contarán con tres años más -hasta el final del curso 2013-2014- para adaptar sus infraestructuras y con cuatro -hasta el 2014-2015- para que sus trabajadores dispongan de la titulación necesaria. Según la Consejería de Educación «circunstancias sobrevenidas» -la crisis económica y los cambios en las titulaciones de Formación Profesional- han impedido a estos centros satisfacer en tres años los requisitos exigidos,por lo que «es sensato pensar en prolongar el plazo»,afirmó ayer la directora general de Ordenación,Innovación y Promoción Educativa,Victoria González Ares.

Esta medida se ha tomado después de las demandas «razonables» de varios ayuntamientos y de los propios responsables de las guarderías. El nuevo plazo -tres y cuatro años- es «más que razonable»,según González Ares,quien recalcó que la «flexibilidad» demostrada por el Ejecutivo en este caso no implica un cambio de criterio. «El decreto de 2008 marca un nuevo camino y no vamos a desviarnos de él,pero en estos momentos de crisis no debemos atosigar a estos centros,que han dado una buena respuesta educativa durante estos años».

Sin esta prórroga,un número importante de guarderías -la Consejería no ha precisado cuántas- se hubieran visto obligadas a cerrar y «se habría producido un problema mayor del que se quería solucionar»,argumentó la directora general. El escenario que se hubiera vivido de ser así sería el de «mandar al paro a muchos profesionales y causar problemas a los padres en la conciliación de su vida laboral y familiar»,apostilló.

En paralelo a esta adaptación,el Gobierno canario,en coordinación con el central,ha promovido la construcción de nuevas escuelas infantiles y la ampliación de algunas ya existentes,un proceso que también va con retraso debido a los problemas de planeamiento urbanístico de los municipios.