El decreto estipula «la delegación de las competencias administrativas de los parques nacionales a los cabildos insulares que quieran asumirlas»,encargándose de las «funciones ejecutivas y de gestión de los parques,así como de las de contratación».
Esta decisión se basa en un criterio de «idoneidad» por «la concurrencia de circunstancias de homogeneidad y continuidad territorial y ecológica entre los parques nacionales y los espacios ubicados en la misma isla».
Además,el Ejecutivo ha decidido la puesta en marcha de una Comisión de Parques Nacionales canarios,que estará formado por la consejería canaria de Agricultura,Pesca y Medio ambiente,los presidentes de los Patronatos de los parques,dos representantes de cada uno de los municipios en cuyo territorio se localicen y dos expertos en conservación de la naturaleza que serán designados por el Ejecutivo autónomo. Este órgano se reunirá con una periodicidad mínima trimestral.