Desde el comité local de Sí se puede en Valle Gran Rey se pide que a la mayor brevedad se comience a trabajar en el tratamiento del material vegetal que se acumula en la zona de La Higuerita en cantidades preocupantes. “No entendemos por qué no se usan las biotrituradoras que posee el Ayuntamiento o, si estas están estropeadas, por qué no se piden o alquilan otras. Lo que no es admisible es que haya tanta cantidad de material vegetal en esta zona”, señala Andrea Witt, portavoz del comité local.

La formación ecosocialista informa que hace bastantes años que la zona se utiliza como depósito provisional de restos de poda generados en los jardines y espacios públicos, pero que “tal y como se encuentra ahora, pocas veces o ninguna”.

El comité Local en Valle Gran Rey de Sí se puede La Gomera expresa su incomprensión de cómo desde el Cabildo y el propio Ayuntamiento se han hecho trabajos de limpieza de terrenos privados y no se planifica someter a estos materiales al triturado para que la materia vegetal resultante pueda ser utilizada en terrenos agrícolas.

En palabras de la representante, «los biorresiduos provenientes de las podas de los jardines municipales y privados, y de las limpiezas de espacios públicos, no debieran dejarse acumular en espera de una quema controlada o de, muchísimo menos, un incendio. Estos residuos, con los tratamientos adecuados, son un recurso muy interesante para la agricultura de Valle Gran Rey y de otros puntos de la isla».

Desde el comité local se recuerda las consecuencias que trajo un incendio en el municipio de Los Llanos de Aridane en La Palma en diciembre de 2016 en un terreno municipal y con condiciones similares. “Ese incendio obligó a la suspensión cautelar de las clases en la guardería infantil de Los Llanos y provocó problemas innecesarios, y aquí también ha habido muchas molestias cuando se ha producido un incendio o se han hecho quemas controladas” insiste Witt.

En este sentido, desde Sí se puede se recuerda lo que dicta la legislación. El artículo 7 de la Ley 22/2011 señala que «las autoridades competentes adoptarán las medidas necesarias para asegurar que la gestión de los residuos se realice sin poner en peligro la salud humana y sin dañar al medio ambiente y las medidas que se adopten en materia de residuos deberán ser coherentes con las estrategias de lucha contra el cambio climático.»

Para Andrea Witt parece claro que «no es coherente con el cambio climático dejar acumular toneladas de residuos vegetales para que después ardan, bien sea en quemas controladas o lo que es peor, a través de un incendio».

«Se debería estar triturando este material, en horarios que no causen molestias a los vecinos y turistas de los barrios de La Calera, El Picacho y Las Orijamas, y haciendo que el municipio trabaje mucho mejor la gestión de este tipo de residuos a través de su valorización».

Tampoco entienden desde la formación ecosocialista que el Consejo Insular de Aguas, en aplicación de su competencia como policía de cauce, o la propia APMUN, permiten que se den este tipo de acúmulos. “Ya de Jesús Ramos, concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, nada esperamos. Seguro que se encogerá de hombros y alegará que no es cosa suya o que él no está aquí” declara para finalizar la portavoz.