El 88 % de los cruceristas que hacen escala en Canarias valoran la posibilidad de viajar a las islas en una opción futura y el 94 % recomendaría a sus amigos que viajen al archipiélago, según ha señalado la consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, María Teresa Lorenzo, en una comparecencia parlamentaria sobre la promoción del turismo de cruceros.

En su intervención, la consejera señaló que esta oferta turística es una categoría «clave» dentro del Plan de Marketing de la Marca Islas Canarias y que en el año 2015 permitió que llegasen 2,2 millones de cruceristas a los distintos puertos del archipiélago, un 15% más que en 2014 y más del doble que en 2005.

María Teresa Lorenzo indicó que se trata de una categoría turística importante y en crecimiento; sin embargo, precisó que está sometido a un nivel de exigencia competitiva muy alto, cuya sostenibilidad no está asegurada, pues se trata de un modelo sometido al poder de decisión de un número reducido de operadores.

Así, apuntó que la decisión del cliente final tiene un peso menor si se compara con el turismo convencional, puesto que tiene que adaptarse a la oferta de cruceros existentes, y recordó que es la compañía naviera o el turoperador quien controla su comercialización y promoción. Esto hace que mientras el 50 % de los turistas convencionales viajan sin paquete organizado, el 100 % de los cruceristas viajan con un paquete completo.

La consejera aclaró, además, que el turismo de cruceros tiene unas características específicas que influyen en las políticas de promoción y la comercialización de los puertos isleños es una tarea que corresponde a la Autoridad Portuaria de Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife, cuya labor ha permitido encontrar un importante y creciente nicho en el mercado de cruceros, reconoció Lorenzo.

Puntualizó que esta realidad no es incompatible con la promoción de otros puertos de Canarias que amplíen sus posibilidades como escala de cruceros, redundando en la captación de nuevas oportunidades de negocio, ampliando la capacidad de acogida y trabajando desde la especialización, pues así se puede atraer a buques de menor tamaño que buscan escalas diferentes y de mayor exclusividad.

La consejera también hizo mención del Plan Estratégico para el segmento de cruceros, que ha permitido desarrollar una plataforma de comunicación para el turismo de cruceros que ya se ha puesto en marcha. María Teresa Lorenzo explicó que esta estrategia tiene tres objetivos: despertar el interés hacia Canarias de futuros cruceristas; incentivarles para que disfruten en su escala de las islas, y promover su estancia en establecimientos alojativos isleños.

Por otro lado, resaltó la evolución favorable del gasto en tierra de los cruceristas en los últimos años, pasando de 41 euros al día a 43,8 euros, lo que multiplicado por los 2,2 millones de cruceristas registrados en 2015 arroja un gasto de cerca de 100 millones de euros, influyendo en la economía local, pues un 53% del gasto se destina a compras, un 21% a restauración y un 11% a excursiones.

Por su parte, la diputada Guadalupe González Taño (CC) indicó que el 3 % de los europeos han hecho un crucero y el 1 % de los asiáticos, y añadió que Canarias, por sus condiciones geográficas, reúne condiciones «magníficas» para ocupar un lugar de privilegio en este sector.

Por esta razón, propuso que, ahora que comienza la temporada alta de cruceros, se lleven a cabo medidas para afianzar este mercado, que «no ha parado de crecer y que seguirá haciéndolo en todos los puertos canarios, lo que permitiría una ampliación e la temporada, como ocurre con el turismo convencional».

Por el Grupo Mixto, Jesús Ramos valoró el plan estratégico para el segmento de cruceros que ha puesto en marcha la Consejería y ve fundamental que los cruceristas no hagan escala en puertos a medio construir, como el de Valle Gran Rey, en La Gomera.

El diputado Román Rodríguez (NC) valoró tener un plan y una estrategia en materia de cruceros, pero pidió que esto no se mitifique porque la capacidad de impacto en la economía local de los cruceristas es «bastante limitada» porque «se bajan poco y gastan menos».

Natividad Arnáiz, de Podemos, comentó que hay distintos estudios que indican que para los clientes de cruceros está siendo más importante el barco que el propio destino. Por ello, consideró que hay que avanzar en la adaptación de ofertas en tierra más innovadoras, con actividades que se dirijan a los nuevos perfiles de cruceristas.

A su vez, abogó por fomentar el producto local, la mediana y pequeña empresa y estudiar nuevas fórmulas propuestas por emprendedores, así como apostar por las nuevas tecnologías, ordenar operadores para que el sector genere en las islas empleo estable y de calidad, e impulsar un turismo de cruceros sostenible y con un impacto ambiental menor, con un sistema de control más sólido que el actual.

La diputada popular Astrid Pérez apuntó que, pese a las cifras favorables de 2015, en Canarias ha habido una disminución del número de cruceros en el primer semestre de este, sobre todo en Fuerteventura, en torno al 12%. En su opinión, la estrategia puesta en marcha por la Consejería de Turismo no está contribuyendo por tanto al crecimiento del mercado. Por ello, demandó que se articulen instrumentos de promoción entre las distintas administraciones implicadas.

En esta misma línea se pronunció la diputada Migdalia Machín, del PSOE, quien también resaltó que todos los operadores coinciden en la idoneidad de Canarias como destino de cruceros, entre otras razones por su clima y otros aspectos que, dijo, hay que reforzar de cara al crucerista que decide bajar a tierra y para retener y ampliar a las navieras, ofertándoles un buen producto.