La ciudad de La Laguna y toda su comunidad religiosa despedirán hoy al rector del Santuario del Cristo de La Laguna, Carlos González Quintero. Según informa Almudena Cruz para el periódico La Opinión «el sacerdote, que durante más de tres décadas fue además párroco en Icod de los Vinos, fue velado hoy en la capilla ardiente dispuesta en el Cristo hasta las 12:00 horas. Antes de la misa de esa hora, su cuerpo fue trasladado a la Catedral, donde el obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, presidió las exequias a las 13:00 horas.
Fuentes de la Diócesis Nivariense confirmaron ayer que la salud del sacerdote, que tenía 80 años, había empeorado en la última semana. González falleció este martes a las 19:30 horas en su propia casa. Entre las distintas autoridades se encontraban los alcaldes de La Laguna, José Alberto Díaz; Icod de Los Vinos, Francisco Javier González y de Hermigua, Pedro Negrín. Asimismo, también estuvo presente el rector de la Universidad de La Laguna, Antonio Martinón y representantes del ejército.
El alcalde de La Laguna, lamentó esta pérdida. «Tuve la oportunidad de conocerlo y ver su trabajo de cerca y se va una persona entregada y buena», lamentó. Fue, continuó el líder municipal, «defensor de los más desfavorecidos y consagró todo su tiempo a ayudar a los más necesitados, siempre con ideas nuevas para ayudar a la sociedad. Mi más sentido pésame a toda su familia y amigos. Sobran las palabras cuando los actos han sido tantos y tan generosos a lo largo de toda una vida entregada a los demás».
Asimismo, el rector del Seminario de La Laguna, Juan Pedro Rivero, fue uno de los primeros ayer en lamentar la pérdida del querido sacerdote. «Fue un hombre de fe. Jovial, cercano, con esa tímida socarronería que sabía más por lo que callaba que por lo que decía», aseguró. «Sensible y detallista, le enseñaron una forma de ser sacerdote que ejerció responsablemente hasta el último día de su vida. Un sacerdote que muere con las botas puestas, queriendo ir a celebrar la misa de ocho en el Santuario del Cristo», añadió.
«No serán pocos los que le echarán en falta. Por donde pasaba, pasaba un aire fresco de buen ambiente, de cordialidad, de cercanía», sentenció Rivero.
Con idéntico cariño habló ayer también el párroco Marcos García, responsable de las iglesias realejeras de El Carmen y La Concepción. Fue, durante once años, uno de sus seminaristas y trabaron una bonita amistad. «Fue, sin duda, una persona tremendamente afable y acogedora. Siempre estaba alegre, donde estaba don Carlos era imposible que entrara la tristeza», explicó.
González Quintero era de padre palmero y madre gomera. Su padre, maestro, fue destinado al municipio de Hermigua y allí conoció a doña Carmen, con quien tuvo cuatro hijos. «Don Carlos, además, tenía una fisionomía entrañable y distintiva. Le gustaba fumar algún puro aunque hace años que su salud ya no se lo permitía», añadió García.
El fallecido sacerdote era natural de Hermigua. Allí nació el ocho de enero de 1936. Fue ordenado presbítero el 5 de junio de 1960 por el obispo Pérez Cáceres. Su primer destino pastoral fue las comunidades de Fuencaliente, en La Palma, informó el obispado.
De allí pasó a ser párroco de Santa Úrsula y de La Milagrosa en Adeje. En 1967 comenzó a desarrollar su ministerio como vicerrector y profesor en el seminario diocesano. Volvió al servicio parroquial, esta vez en las parroquias de Concepción y el Carmen, en Los Realejos.
Fue nombrado vicario zona en 1974. En Icod de los Vinos atendió como párroco la comunidad de San Marcos y otras de ese municipio entre 1976 y 2006. Fue arcipreste de Icod de los Vinos. En 2006 fue nombrado Vicario Episcopal del norte de Tenerife. Finalmente, en 2010 pasó a ser Rector del Santuario del Santísimo Cristo de La Laguna.
